El Honrado

Capítulo 4

—Ese es un estúpido círculo ritual. —Satoru sacudió la cabeza mientras caminaba hacia la hechicera y la empujaba a un lado. Los ojos de la mujer se abrieron de par en par y gritó mientras caía al suelo. Satoru se quedó mirando el círculo ritual terriblemente ineficiente, completamente autodestructivo y, en general, estúpido; ni siquiera el peor hechicero de Jujutsu haría uso de algo tan descaradamente retorcido como este. Honestamente, cualquiera que realmente entendiera la mecánica de los rituales echaría un vistazo a este trabajo amateur y escupiría sobre él.

Bueno, la hechicera hizo lo mejor que pudo. Ya había admitido el hecho de que no entendía cómo funcionaba o cuál era la mecánica metafísica detrás de esto. Entonces, Satoru no vio la necesidad de castigarla. Aun así, necesitaba detenerse y sentarse en la esquina si quería salvar esta cosa. Ella parecía herida y ofendida, pero a él no le importaba. "Sin ofenderte, señorita, pero te sugiero que te quedes al margen y dejes que lo haga el experto. Porque no tengo intención de dejar que nadie muera hoy, ¿de acuerdo?"

¿Era realmente un experto en rituales? No, en realidad no. Pero los Seis Ojos le otorgaban la capacidad de comprender casi instantáneamente casi todo lo que veía. Y comprendía cómo funcionaba este y, lo que es más importante, de esa comprensión surgió el conocimiento de cómo alterarlo para que fuera más eficiente y más fácil de usar. Es cierto que, cuando Satoru miró los tres círculos, vio varias formas de deshacerse del componente sacrificial por completo, aunque la sangre no se podía cambiar, ya que la vitae humana era un excelente conductor de la Energía Maldita y realmente no había un equivalente mejor; ni siquiera la Tinta Maldita tenía la misma conductividad que la sangre.

—Muy bien... veamos. —Satoru se agachó y puso un dedo en el círculo del medio y, usando un flujo constante de Energía Maldita, comenzó a alterar la forma y la función del círculo ritual. En primer lugar, la necesidad de un sacrificio humano fue descartada; esa parte era simplemente estúpida. Sin embargo, todavía podía usar la sangre; todo lo que tenía que hacer era reprogramarla para que funcionara de manera diferente. Con Seis Ojos, Satoru conocía el propósito de los símbolos, pero eso no significaba que entendiera su significado; era un enigma bastante común entre quienes estudiaban Jujutsu antiguo. Aun así, no era un tonto y el proceso de extrapolar todo el asunto no fue particularmente difícil. Después de todo, solo le tomó diez segundos. —Ah, ya veo. Entonces, así es como funciona.

Sonriendo, Satoru movió los círculos rituales. En primer lugar, este "Demonio Azul" estaba a punto de convertirse tanto en la batería como en el sacrificio. Satory modificó los símbolos de su círculo para asegurarse de que no pudiera escapar, ya que el último había sido tan mal construido que habría permitido al Demonio Azul romper muy fácilmente los supuestos "lazos" que lo habrían mantenido en su lugar; de hecho, casi parecía un acto deliberado de sabotaje. También estaba el hecho de que la matriz ritual que estaba destinada a invocar a un Demonio Azul parecía más como si estuviera destinada a invocar al Demonio Azul, un individuo específico en conjunto, probablemente una maldición muy poderosa de algún tipo. Estas personas alguna vez fueron parte de una civilización interplanetaria, ¿no? Eso significaba que las maldiciones con las que tendrían que lidiar serían significativamente más fuertes que las cosas a las que estaba acostumbrado. Más concretamente, era totalmente posible que la versión original del ritual de la hechicera fuera, de hecho, diseñada por el propio Demonio Azul como una forma de atravesar mundos enteros o algo así.

Pero ahora, con el ajuste del círculo por parte de Satoru, el Demonio Azul (o lo que fuera que en realidad era) se llevaría una sorpresa muy interesante.