Senpai (Nijimura x Miyaji)

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-¡Midorima date prisa!

-Ya voy Nijimura-Senpai.

-Rayos... ¿Siempre fuiste tan lento?- El azabache sonrió, haciendo que Midorima gruñera.

-Me obligaron a guardar todo lo que usamos en el entrenamiento.

-Está bien, por hoy me creeré esa excusa.- El peli negro volvió a reír, pasando sus brazos por los hombros de Midorima. Sin saber que no muy lejos de ellos, les observaban dos chicos con una expresión no muy amigable.

Esos dos chicos, éramos Takao Kazunari y yo, Miyaji Kiyoshi, quienes observábamos como esos dos se iban a saber dónde, como llevaba pasando desde hace al menos dos meses.

-No lo soporto más Miyaji-San... ¡Quiero que me devuelva a mi Shin-Chan!- Gritó Takao intentando correr hacia ellos, cosa que hizo que yo tuviera que pararle.

-Estate quieto Takao, a mi también me molesta, pero no puedes correr hacia ellos y simplemente llevarte a Midorima corriendo.

-¡¿Porque no?!- Volvió a gritar hinchando las mejillas.

-Porque está mal.

-¡Pero no es justo! ¡Apenas me deja tiempo para estar con Shin-Chan!- Takao se cruzó de brazos, desviando su mirada hacia el suelo.

-Venga no llores.- Reí con burla, cosa que hizo que Takao se sonrojará.

-¡No estoy llorando! Además, ¿A usted porque le molesta tanto que se vaya con Shin-Chan? ¿No será que está enamorado de él, verdad?- Miró hacia mí, con claro aire de celos, pues era casi imposible el no notar que Takao estaba enamorado de Midorima.

-¡Claro que no! ¡¿Cómo me va a gustar Midorima?! Lo que me molesta es que ese tipo se crea mejor Senpai que yo. ¡Ya no estudian en el mismo instituto, al único que debería llamar "Senpai" es a mí!- Takao estalló en carcajadas.

-¡¿Está celoso de que llame Senpai a otro?!- Volvió a reír logrando sonrojarme.

-¡C-Cállate!- Desvié la mirada hacia mi derecha, evitando que Takao viera mi sonrojo.

-Miyaji-San, sigámosles.

-Takao, no podemos hacer eso.

-Entonces supongo que Shin-Chan seguirá llamando "Senpai" a él.

(...)

No sé cómo lo hizo Takao, pero llevábamos ya siguiéndolos media hora. No lo entendía, solo se paseaban de un lado a otro sin destino fijo ni pararse en ningún sitio. Aunque a mí realmente eso no me molestaba, al único que molestaba era a Takao, quien parecía estar a punto de romper algo cada vez que ese chico se acercaba más a Midorima.

-No me gusta.- Mustió mirándolos.

-No hables tan fuerte o nos oirán.- Midorima le dijo algo al azabache, este rió, palmeando su hombro y para seguido revolver el pelo de Midorima.

-¡Aléjate de Shin-Chan!- Takao gritó a todo pulmón, haciendo que, aparte ellos dos, también voltearan a vernos varios de los peatones que pasaban. Por suerte fue rápido, y nos escondí a mí y a Takao en un callejón cercano, antes de que llegaran a vernos.

-¡¿Se puede saber qué te pasa?! ¡Casi nos ven!

-L-Lo siento no sé qué me paso...- Bajó la mirada.

-Venga... Será mejor que volvamos a casa, seguro que ya se habrán ido.- Takao asintió cabizbajo, y empezamos a andar de regreso.

Al día siguiente, cuando terminó la práctica, salí antes que nadie, cosa extraña en mí ya que solía ser siempre de los últimos. Y al salir, ahí estaba. Parado delante de la preparatoria, seguramente esperando de nuevo a Midorima.

¡I ship it! (KnB)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora