Capítulo 19

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Lucifer en una armadura completa de batalla y su horca lista para la batalla a su lado estaban los otros pecados que no lo miraban hacía mucho que dejaron de tenerle respeto y ser leales a él. Pero con las circunstancias tenían que reunirse a su lado Paimon siempre leal junto a los otros Goetias, parece que Adán y el ejecutor también habían secuestrado a varios de los suyos.

En el hospital Charlie estaba acostada, le habían suministrado varios tranquilizantes, Angel dust y los otros miembros del hotel estaban con ella excepto Alastor que había desaparecido a algún lugar.

Su hija ahora sabía la verdad, toda, las atrocidades que cometió lo que le hizo a Adán nunca olvidará la mirada que le dirigió Charlie de puro horror, se la habían dirigido humanos, demonios y hasta sus hermanos pero su hija no.

Si Adan no hubiera aparecido y provocado todo esto nada habría pasado se las pagaría junto el Ejecutor estaba preparado utilizando la biblioteca oculta y más peligrosa de Lilith y usando las fuerzas combinadas de todos los Goetia ni ese ángel podría con él.

Utilizando las frecuencias de radio, digital y la magia vieron como las frecuencias de magia eran cada vez mayores como pulsaciones era en la zona cerca de donde solía reunirse con sus allegados más antiguos ahora la mayoría muertos, parecía que fue una elección a propósito del Ejecutor pues este cazaba ángeles caídos como moscas.

En ese momento un portal apareció el rey y los demás se tensaron preparados.


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Mientras en el hospital Charlie se despertaba Angel al verlo se levantó a su lado.

—¡Charlie! Menos mal que te estás despertando te han puesto más drogas de las que me he metido yo jamás—se rió la araña intentando aligerar el ambiente.

—Déjala en paz chaval esta echa una mierda dejala un respiro—el gato por una vez no tenía su expresión huraña.

Charlie le sonrió aún adormilada, agradecía tener a sus amigos con ella aquí sino no sabría que hacer pero a todo eso le surgió una pregunta en su mente.

—¿Como está Vaggie?—

El ambiente se enfrió y Charlie aunque aún estaba bajo los efectos de los sedantes lo notó.

—Vaggie sigue igual...han tenido que atarla con correas a la cama porque se auto lesionaba y los médicos dicen que a tenido ya unos ataques cerebrales, seguramente le dejaran secuelas—dijo Husk.

Nadie dijo nada del terrible destino del ángel caído Charlie le temblaba el labio de las ganas de llorar que tenía, sabía que Adan y el otro ángel tenían sus razones justas y más con lo que se había revelado pero Vaggie no merecía eso y no quería que su gente siguiera sufriendo.

—Charlie lo lamento—dijo una voz conocida que venia de la puerta.

Delante de ellos estaba una chica bajita de pelo plateado y ojos azules con pecas plateadas iba con una capa que la cubría pero Charlie la reconoció enseguida.

—¡Emily!—Si pudiera habría ido al encuentro de su amiga pero la serafín viendo como estaba fue a su encuentro y se abrazaron con lágrimas.

—Oh Charlie no sabes cómo te he echado de menos han pasado tantas cosas—la pobre serafina lloraba y finalmente la fatiga le alcanzó los otros demonios le alcanzaron una silla y le dieron una taza humeante de sopa ella les agradeció con una sonrisa.

—Gracias ¿sois los amigos de Charlie del hotel no?—

—Si esos somos y tu eres la serafina amiga de Charlie ¿eh?—Cherry bomb sonrió.

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