»Esposa de mentira 🌷 +18 [ Lizkook ]

🌷; 01

—¿Y qué se supone que harás ahora? Los idiotas de Zico no se van a quedar tranquilos porque les hayas pagado una cuarta parte de lo que les debes — solté un suspiro y negué con la cabeza, estando de acuerdo con Yoongi.

—No lo sé, pero tendré que hacer cardio en los últimos días si me los llegará a encontrar por allí — dije, completamente rendida.

—¿No haz pensado en buscarte un trabajo de planta? Porque eso de estar ayudando en tiendas de ropa sólo cuando te necesiten, no creo que sea algo bueno, además, creo que así podrías conseguir el dinero más rápido para deshacerte de esos idiotas — le dió una calada a su cigarrillo que había comprado en la tiendita de nuestra calle y se había venido a sentar aquí conmigo.

Hice un leve puchero, pensando en lo que había dicho, pero, no creo que pueda tener un trabajo de planta aún cuando mis estudios no fueron finalizados y mi expediente de trabajo sólo hay registros de ser suplente en algunos trabajos. Solté un suspiro y recargue mi cabeza en el hombro de Yoongi, escuchando como maldecía por aquello.

Yoongi no era un tipo que le encantará el contacto físico, al contrario, lo odiaba, sólo en algunas ocasiones me dejaba recargarme (así como ahora), en su hombro y pensar bien las cosas, aunque para ser honesta, no había mucho que pensar.

—¿Tienes planes para hoy? — pregunté en un murmuró, haciendo que él tirará el humo del cigarro por la nariz y asistiera.

—Tengo una pelea esta noche, posiblemente llegue tarde, así que duérmete antes y no me esperes — asentí.

Estaba de más decir que él y yo, vivíamos juntos y ambos aportabamos para pagar la renta del cochinero que teníamos por hogar, aunque ni siquiera valiera lo que pagamos por ese horrible lugar, pero era para lo que nos alcanzaba a fin de cuentas. Y no podía quejarme, aunque quisiera.

Él me dió un leve empujón con su hombro, en señal de que me levantará de su hombro, cosa que hice con refunfuños, me senté correctamente y volví a soltar un suspiro cansado.

—Me voy, tengo que ir a visitar a unos amigos, te veo en la noche o mañana temprano — asentí y se levantó, sin despedirse ni nada, simplemente se fue, dejándome sola y sentada en la vereda de aquella calle.

Eché mi cabello hacia atrás y saqué mi teléfono al sentirlo vibrar en mi pantalón, fruncí un poco el entrecejo al ver que era un mensaje de Jackson.

Yoongi.

[📍 Ubicación]

Ve ahí, están contratando en tiempo completo.

Solté una risita y negué con la cabeza repetidas veces. Sabía que este idiota no sólo lo había dicho al azar, sino que ya tenia planeado mandarme a trabajar en una maldita tienda. Idiota.

—Eres demasiado tonto ayudándome, si tan sólo me prestaras dinero para pagarle a esos idiotas, agh, tonto — solté un chasquido y me levanté, rumbo a aquella tienda donde se solicitaba una cajera de día y noche.

—Amo con mi vida los bolsos de marca, creo que ya lo notaste, pero soy fanática en coleccionar millones de bolsos así, espero y lo entiendas — la chica frente a mí suelta una risa bastante falsa y llena de hipocresía. Para ser honesto, sabía que este tipo de persona sólo necesitaba un minuto para tener sus ojos puestos en mi billetera.

—Claro que lo entiendo — ella sonrió coqueta. —Como también entiendo que tienes un gran problema con adquirir cosas, quiero decir; ¿Te haz tratado con algún psiquiatra? Creo que ser compradora compulsiva termina siendo una enfermedad muy horrible, ya qué esas personas jamás tienen un límite — finalicé y desde que mencioné al psiquiatra, su rostro se deformó, unas facciones de ofendida y molesta surgieron desde su rostro hasta el movimiento de sus manos.

—¡Eres un maldito idiota, no puedo creer que mi madre haya querido que te conociera! — levantándose molesta, dándome una mirada de muerte, salió del lujoso restaurante dando pasos fuertes y alejándose de mi vista.

Aún seguía preguntándome, porque mi madre me creaba citas a ciegas con hijas de sus amigas, cuando yo mismo le dije que no quería nada con aquellas mimadas hijas de papi y mami, las cuales siempre van a pedir dinero para ser felices e incluso me van a pedir dinero hasta porque sonrían.

Solté un suspiro cansado, tomé mi copa de vino tinto y bebí, saboreando un poco de lo que aquella chica desperdicio por estar hablando de bolsos, zapatillas y autos que sus padres le habían comprado sólo por capricho. Dios, hasta de sólo recordarlo la cabeza me dolía.

—Señor Jeon — ladeó mi cabeza al mirar a mi asistente caminar hacia mí y con su tablet en manos.

—¿Qué sucede, Jisoo? — pregunté, dejando la copa de vino, centrando mi atención en ella, quien no dudo en hacer unos movimientos en la tablet y entregarmela. Tomé la tablet y no me sorprendió en absoluto en ver una lista de chicas por ver en citas, que mi madre se había tomado el tiempo de organizarme.

—La señora Jeon quiere que desde mañana a las ocho empiece con las chicas, quiere que las vea a cada una en un lugar distinto y ya reservado, señor — dejé la tablet en la mesa con molestia.

—¿Hasta cuándo va acabar está maldita necedad suya? — pregunté entre dientes. Solté un suspiro cansado, cuando de repente, una idea un tanto estúpida llegó a mi cabeza y simplemente la solté. —Jisoo, dile a mi madre que ya tengo una chica por mi cuenta, que no se la presentaré aún pero ella pronto estará pisando el suelo de su casa, dile eso — Jisoo, aún dudando de mi estúpida idea, cuestionó mi decisión.

—Señor, ¿Está seguro de eso? — asentí rápidamente, pues el cansancio de estar conociendo a seis chicas por día y descuidar mi empresa, me estaba desesperando y alterando los nervios.

—Sí, también aseguralo tú misma, para que ella no dude. Ya veré qué hago después con eso — Jisoo asintió, hizo una revenrencia y se marchó, llevándose la tablet con ella.

Ahora sólo me quedaba encontrar a una chica indicada para esto. Pero...¿De dónde demonios la voy a sacar?

—Perfecto Jungkook, sales de un problema y te metes en otro, simplemente perfecto.

—LaOmmaChida💜💜✨✨✨