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──── ¿Ya los vieron? Son guapísimos
La gente parecía reunida en un solo lugar, pareciendo grabar o tomarle foto a algo y el bullicio que hacían por lo que sea que fuera no pasó desapercibido por los tres que caminaban mientras hacían patrulla.
──── ¿Habrá pasado algo malo? ──── el rubio preguntó.
──── No, suena más a bullicio de emoción.
Sakura solo mantuvo sus ojos puestos en lo que fuera que hubiera allí, hasta lograr ver algo de una cabellera blanca, eso lo hizo entrar en pánico y congelarse, ya comprendía que sucedía, ese sujeto siempre era tan llamativo que tampoco disimulaba lo mucho que amaba tener la atención sobre el, lo más probable es que estuviera posando para las fotografías que las mujeres tomaban.
──── Vamonos de aquí ──── Se dió la vuelta con la esperanza de que aquel par (porque probablemente ese tipo no venía solo) no lo viese.
──── ¿Sucede algo Sakura? Luces aterrado
──── Estoy bien ──── Mentía, en su rostro se notaba y Suo se había dado cuenta.
──── ¡Suguru! ¡Mira! ──── Escuchar la voz de aquel hombre hizo que se sobre saltara y volteo a ver, notando que ahora el albino apuntaba hacia el y que aquel pelinegro como la demás gente no apartaban la mirada de Sakura, haciéndolo sentir incómodo ──── ¡Ahí está!
Por supuesto que ambos hombres corrieron hacia el y Sakura por instinto huyó también, siendo seguido por los dos, dejando extrañados tanto a Nirei como a Suo.
Quizás pasó unos minutos corriendo, no sabía ni cuánto tiempo había sido pero terminó refugiandose en el café de Kotoha, quién veía a Sakura un tanto confundida por su actuar.
──── ¿Que sucede? Parece como si te escondes de algo ──── su sonrisa era mas para intentar calmar los nervios del muchacho, pero fue algo imposible, ya que este se estaba escondiendo debajo de una de las mesas del local.
──── Escucha, si vienen dos hombres a preguntar por mí, diles que no he pasado por aquí, ¿De acuerdo?
──── ¿Que? ¿Pero porque- ──── la castaña no pudo seguir preguntando que estaba sucediendo, pues la puerta se abrió dejando ver a aquellos dos que lo habían seguido pero que por unos minutos lo perdieron de vista.
──── Disculpe, ha visto a un chico de cabello negro y blanco, sus ojos también son de distinto color ──── Kotoha vió de rojo donde Sakura estaba escondido y volvió a ver a aquellos dos, negando.
──── No, lo siento, una persona con esa descripción no me suena para nada ──── por supuesto que el albino no se veía tan convencido y entró, inspeccionando todo el local haciendo que la castaña sospechara aún más de lo que sucedía.
──── ¡Lo encontré! ──── a como pudo, sacó a Sakura de su escondite quien comenzó a patalear para que no lo atrapará.
──── ¡Suéltame viejo!
Kotoha comenzaba a preocuparse y justo habían llegado Nirei y Suo, viendo como el pobre chico bi color trataba de sacarse de las manos del más alto.
──── Secuestrar a un menor de edad va en contra de la ley, ¿Saben? Vamos a tener que llamar a la policía ──── Suo con su expresión calmada dijo todo eso, tratando de infundir miedo en ambos hombres, pero lo único que recibió fue una risa por parte del de hebras negras.
──── Se equivocan, no venimos aquí para secuestrarlo ──── Los tres adolescentes voltearon a verlo ──── Estábamos buscándolo porque escapó de casa, nos preocupamos mucho y vinimos a buscarlo, es normal en los padres preocuparse por sus hijos, ¿No creen?
──── ¿Padres?
Ahora los tres estaban confundidos.
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