Sus recuerdos de infancia son difusos, no se considera así mismo un chico forjado de eventos traumáticos.
Aunque, sí hay uno.
Kim Seonwoo era el menor de su clase; el destino no estuvo a su favor desde el día de su nacimiento, puesto que su cumpleaños le había conseguido adelantarse en la vida escolar. Siendo un niño pequeño de pálida piel, cabello azabache e incesivos de zorrito, no se considera así mismo un alumno popular. Y su profesora tampoco parece estar a su favor cuando lanza la sugerencia de pasar al frente para cantar la canción de "Los tres osos", y Sunoo no tuvo más remedio que ofrecerse de voluntario cuando la dulce mirada de la mujer deparó en él.
El menor de la clase se abre paso entre el laberinto de butacas plastificadas, escondiendo sus pequeñas manos temblorosas entre las mangas de su suéter. Sunoo está aterrado, como si el pizarrón fuese a caerle encima de un momento a otro. Sin embargo, lo oculta demasiado bien cuando se planta frente a todos sus compañeros.
—Bueno, Ddeonu. Puedes iniciar —alentó la mujer que de forma indirecta le había obligado a subir ahí, y aún así el pequeño azabache no puede odiarle cuando le regala una de sus características dulces sonrisas.
Sunoo traga saliva, haciendo eco por toda la clase. Sintiéndose evidenciado sobre su falta de autoconfianza. Aún así, inhala profundo preparándose mentalmente por lo que está a punto de hacer.
Cuando sus labios finalmente se separan, el aula tapizada en coloridos anuncios se inundó de la dulce voz que poseía el azabache. Cada nota impregnándose en armonía al ambiente que rodeaba su atmósfera.
Gom semariga han jibe isseo
Appa gom, eomma gom, agi gom
Appa gom eun ddoongddoong hae
Eomma gom eun narsshin hae
Agi gom en ai gwiyeowo!
eusseuk! eusseuk! jarhanda~Mientras tanto, en el fondo del aula descansa sobre su dibujo inconcluso un castaño oscuro, quien apenas escucha ese dulce sonido despabila de su siesta. Su avellanada mirada viaja hasta el frente de su aula; lo primero que sus ojos divisan son una cabellera azabache vagamente familiar, supone que se la debió cruzar antes en su clase pero hasta ese momento le presta verdadera atención. Sus rosados labios se mueven entonando aquella canción infantil que les enseñaron hace un par de días, mientras que su rebelde cabello oscuro cae sobre sus ojos con elegancia. El castaño ladea su cabeza con suma confusión, sintiendo un incesante golpeteo en su pecho junto a un revoloteo sobre su estómago; y no puede evitar culpar a su progenitora por hacerle beber ese desconfiable batido que le promete un cuerpo 'sano', sabía que no era normal juntar huevos, pimiento y papaya.
Kim Seonwoo finaliza con la melodia, y lo siguiente que sus oídos captan son las risas burlonas de todos sus compañeros. Y él no entiende por qué, ¿qué hizo mal? ¿Desafinó? ¿Olvidó la letra? Él no lo sabe, solamente consigue hacerse más pequeño frente al resto para terminar por huir fuera del aula, sintiendo su mirada nublada gracias a las lágrimas acumuladas que no tardan en resbalar por sus mejillas.
El castaño escucha a su profesora reprenderles, mientras él tiene el impulso de objetarle que no les ha regañado lo suficiente antes de ir tras el azabache. Bufa con molestia, viendo todo el trabajo que les dejó en castigo. Aún así, deja su libreta de lado y se recuesta para seguir durmiendo.
Sin embargo, no contaba con que todas sus siguientes siestas se verían interrumpidas por el recuerdo de un ángel cantando esa canción que a él le parecía desesperante. Al menos, aprendería a tolerarla.
★!
Esta historia es una adaptación. Todo el contenido aquí presentado es propiedad de su autor(a) original, -GoldenRainbow, a quien corresponden todos los créditos.
ESTÁS LEYENDO
Love Gummy | SS.
Fanfiction𝐒𝐔𝐍𝗚★𝐒𝐔𝐍: "El destino sabe a caramelo." Juzgar a un libro por su portada lleva a Sunoo directo al desastre, cuando descubre que posiblemente su "bully" personal es literalmente lo opuesto a aquello que le muestra. El chico que le molesta desd...