Estaba encerrado en su cuarto una vez más, ya había llegado el viernes y ni siquiera recordaba que había pasado en toda la semana o si tan siquiera había hablado con alguien, pensaba que seguramente había actuado como un zombie y muy lejos de la realidad no estaba, puesto que todos ahora pensaban que era un rarito por siempre estar chocando con las puertas y por siempre ignorar a todo el que le hablara.Era fácil juzgarlo y pensar que era muy raro, pero nadie conocía lo que estaba viviendo y lo que sentía, aún si la gente supiera, pensaría que lo que siente es mínimo y que ellos tienen una vida más difícil, porque no había nadie que se pusiera en sus zapatos y fuera comprensible, todos creían que solo estaba exagerando y que era una situación fácil de superar.
Todos estaban lo suficientemente ocupados con sus propios asuntos que a nadie le importaba lo que estuviera pasando con Shoto, ni siquiera a sus propios amigos que estaban más centrados en no reprobar en una materia. Incluso para sus mejores amigos, se había convertido en un robot que parecía no sentir nada ni poder expresarse, por lo que habían decidido dejar de hablar con él hasta que las cosas mejorarán.
A nadie le agrada la idea de tener que solucionar los problemas de los demás solo por tener un vínculo de amistad con ellos, que horror.
Esto sólo empeoraba la salud mental del bicolor, quien estaba derrotado en su comoda y dulce cama, llorando a mares en silencio y viendo un punto fijo.
Se preguntaba ¿por qué? ¿acaso había cometido un pecado para tener que sufrir eso? Toda su vida se había ido en picada, estaba en el punto más alto y hasta era raro para él estar de maravilla a diario, que la relación con sus amigos había mejorado a montones al igual que con su familia.
Nada podía ser de rosa, todo lo que sube tiene que bajar y para su mala suerte, había subido tan rápido que la bajada sería dolorosa y fuerte.
Sus calificaciones a la vez, también habían empeorado, pasó de tener un 10 perfecto a bajar a un 8, algo que le causaba un gran nudo en la garganta al haber sido ganador de diplomas de excelencia académica.
Y ya no le quedaba otro remedio, todo había empeorado tan repentinamente y no había otra cosa para hacer ni para salvarse, tenía que aceptar el cruel destino y aprender lo que fuera necesario de esto...
Miraba fijamente el reloj en su mesita de noche, viendo que eran las 5 de la madrugada en punto ¿acaso había pasado toda la noche llorando y pensando en lo cruel que era el universo con él? Probablemente, sí, debido al dolor pulsante que surgía en su cabeza repetidas veces, al igual que el ardor en sus ojos.
No podía evitar culparse por todo lo que pasaba, específicamente con sus amigos, aun que esto si fue cien por ciento su culpa recordaba lo que alguna vez les dijo a ellos hace un tiempo...
Una noche calurosa del verano, de vacaciones en algún país norteamericano junto a sus mejores amigos, a los que él mismo se habría encargado de invitar. Disfrutaban de unos deliciosos helados, mientras que reían mientras caminaban.La vibra en el centro de la ciudad de Huatulco era hermosa, con algunos shows folklóricos, vendedores, turistas caminando y distintos restaurantes en la zona.
Habían rentado un carro y viajaron de su resort hasta el centro, siendo llevados hasta allá por un lugareño que aseguraba que se la pasarían de excelencia. Por lo que, tras un largo día de playa y piscina finalmente tenían que disfrutar de una deliciosa cena.
Shoto no podía estar más que feliz, estaba seguro de que había encontrado a su familia y no necesitaba a nadie más en su vida, a pesar de no ser de la misma sangre, se abrazaban.
Sin importar que ellos fueran personas heridas, el destino habría juntado sus caminos y ahora estaban sanando sus heridas entre ellos. - "Chicos.. Suena muy raro pero.." Shoto rascó su nuca, algo inseguro mientras se detenía. - "Mejor olviden eso, les diré en el hotel." Negó con su cabeza, mientras les dedicaba una sonrisa.
- "Sabes que nos puedes decir todo... Siempre te vamos a apoyar en lo que tú quieras, no importa." Uraraka comía de su helado frito mientras hablaba. - "No hables con la comida en la boca." Iida le dió un codazo, provocando diversión entre ellos.
Todoroki se sintió nervioso, no quería pedirles eso pero sabia que era parte de su filosofía y era algo que constantemente les repetía a sus amigos, quería concentrarse en lo maravilloso que sería el día siguiente, pero solo se formaba un nudo en su garganta.
"Una persona herida no merece estar cerca de las personas, solo les haría más daño y ellas no son responsables."
Se repetía a si mismo esa frase una y otra vez, incluso era algo que siempre mencionaba cuando surgía un problema con alguien y este simplemente lastimaba a su pareja o algo similar, no tienes la responsabilidad de ser el psicólogo de tus amigos o tus cercanos...
Tragaba saliva repetidas veces, había dejado de prestar atención a lo que sus amigos decían y ni siquiera se dio cuenta cuando ya les había dado su tarjeta de crédito para comprar otro postre.
Solo quería llegar al hotel y tirarse a la cama, no comprendía su razón para ser así siempre, aun que el momento ameritaba la felicidad, él simplemente no podía.
Y cuando sus deseos se hicieron órdenes, ahora se encontraba con todos sus amigos en el hotel. - "No sé cómo saqué esta conclusión pero... Yo quisiera decirles que si algún día yo llegó a estar muy mal.. Quiero que se alejen de mi, sin importar cuanto necesite el apoyo de alguien." Sus palabras causaron una reacción de sorpresa en sus amigos, pero ninguno tuvo la valentía de hacerle ver que estaba mal, simplemente cumplirían sus deseos.
Un viaje que debería estar marcado para la felicidad, tenía una marca de tristeza inmensa para él.Pero basta de pensar en eso, tenía que recordar que todo eso lo había llevado a su situación actual, había perdido a todos sus amigos por su propia culpa.
Michitobionico ♥︎'s Hoon
(cada día tengo menos inspiración 💔)
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🍓 - Lα llαѵᧉ Dᧉl Coꭇαzón 𝖽ᧉ 𝖳𝗈𝖽𝗈ꭇ𝗈𝗄ı - Bαkuł𖹭d𖹭
Fanfictionㅤㅤㅤ ꫪ ꯭֟፝͡ ꫪㅤㅤ🍎ㅤㅤꫪ ꯭֟፝͡ ꫪ ഢ 🌹 𝙱α𝗄υł𖹭𝖽𖹭 ⠞ ૮ ˊ ᵔ ˋ აㅤ 𝙲𝗎α𝗇𝖽𝗈 𝙱α𝗄𝗎𝗀𝗈𝗎 𝙺α𝗍𝗌𝗎𝗄𝗂 𝗀α𝗇α 𝖾𝗅 𝟣° 𝗅𝗎𝗀α𝗋 𝖾𝗇 𝖾𝗅 𝖿𝖾𝗌𝗍𝗂𝗏α𝗅 𝖽𝖾𝗉𝗈𝗋𝗍𝗂𝗏𝗈, 𝗅α𝗌 𝖼𝗈𝗌α𝗌 𝖼𝖺𝗆𝖻𝗂α�...