Si me ves... Ranma soy de ti

Momentos juntos

¡Hola!  Lamento mucho la demora, juro que intento hacer esto tan rápido como puedo. Pero tengo mil cosas en la cabeza y cuesta darme una idea clara de todo antes de escribirlo :c

Por favor, disfruten de la lectura y nuevamente les pido que si ven fallas o tienen críticas constructivas, estoy feliz de leer sus comentarios.

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Ranma recostó su cuerpo en la bañera, dejando que el agua caliente destensara sus músculos. Su mente últimamente había estado atacándolo con miles de escenarios donde Akane lo rechazaba después de aquel beso en el dojo. La chica ni siquiera le dirigía una mirada desde entonces y era verdaderamente angustiante pensar que tal vez había hecho algo mal, o tal vez no le gustó besarlo, ¿y si creía que era malo haciendo algo tan "simple"?

Suspiró pesadamente y se dejó caer por el agua hasta que sólo sus ojos se asomaban por la orilla. Qué frustrante es Akane, pensaba, y es que de cierta forma estaba lastimando su orgullo. Incluso llegó a culparse a si mismo pensando que se aprovechó de la situación, pero finalmente, fue ella quien se lo pidió en un principio. Entonces no estaba logrando entender por qué Akane estaba actuando como si él no existiera.

Lo que le parecía más raro aún es que desde entonces, Akane había comenzado a utilizar ropa más ligera dentro de la casa. ¿Cómo explicarlo? Ella no era la clase de chica que usara ropa con escotes y ceñida al cuerpo, era más de utilizar faldas y vestidos largos, a veces pantalones holgados y camisas grandes. ¿Es porque ya estaba por cumplir 18 y quería verse más femenina?

Esto era más que frustrante porque no podía alejar la vista de ella, se veía mucho más adulta y lucía hermosa. Su orgullo le decía que debía mantener la mirada alejada de ella, ya que Akane no había sido capaz de mirarlo ni una sola vez desde entonces, era como una competencia para él. Pero claramente, estaba perdiendo esa estúpida competencia que él mismo se inventó. 

Ranma escuchó como la puerta principal del baño se abría y pensó que tal vez su padre entraría al baño. Lo cual no era extraño, pero le resultaba molesto.

- Papá, dame un minuto.- Dijo fastidiado.

- Ham... Ranma...- La voz de Akane se escuchó como un susurro tras la puerta que daba a la bañera, podía ver su silueta desde la entrada por la transparencia de la segunda puerta. Asustado en menos de un segundo tapó sus partes nobles y se acomodó para que, si la chica entraba, no pudiera ver más que su rostro y hombros.- Kasumi me pidió recoger la ropa para lavar, pero no está tu ropa.

- La dejé de este lado.

Akane deslizó la puerta despacio, dándole todo el tiempo del mundo para cubrirse, y entró sin dirigirle la mirada. Él la notó temblorosa mientras se dirigía a la esquina donde él muy descuidadamente había dejado su ropa.

- ¿Tienes algo para salir del baño o quieres que te traiga ropa limpia para que puedas salir?

- ¿Podrías traerme algo?- Se había deslizado a la orilla de la tina descansando sus brazos en el borde para apoyar su rostro ahí. La chica se volteó para salir, pero Ranma decidió llamar su atención.- Akane, mírame.

Akane dejó salir el aire de sus pulmones y se giró lentamente, con las mejillas rosadas y apretando los labios. Está nerviosa, se dijo Ranma a si mismo al ver como sus manos temblaban un poco mientras le mantenía la mirada. Akane no pudo evitar recorrer la piel húmeda de Ranma, podía ver como finas gotas de agua hacían un recorrido por su piel. Gotas que caían de su cabello y otras que simplemente bajaban por sus hombros, se veía atractivo. Akane sacudió la cabeza para eliminar esos pensamientos de su mente y volvió a posar sus ojos en la mirada del chico.