Un po' contorto 「Hyunho」

DUE

—¿Algo está mal?— dijo una voz familiar antes de que un brazo se colgara de los hombros de Hyunjin.

Hyunjin miró a Seungmin, pero siguió caminando. Su próxima clase iba a comenzar en diez minutos y era una a la que no podía llegar tarde.

—Nada.

—Pura mierda. Suéltalo.- Los ojos marrón oscuro de su amigo estaban fijos en él con curiosidad.

Hyunjin se encogió de hombros.

—Estoy en bancarrota. Y encima de eso, van a terminar mi beca si no mejoro mis notas en tres clases.

Seungmin frunció el ceño.

—Creía que ya habías hablado con Bang y Choi y explicado tu situación.

Suspirando, Hyunjin se pasó una mano por el pelo.

—Sí. Pero también está Mecánica de Fluidos.

Seungmin hizo una mueca.

—Lee.

—Síp.— Hyunjin dijo miserablemente.

El profesor titular más joven de la escuela, Lee Minho tenía el apodo de "Profesor Imbécil" por una razón.

Estricto y duro, fijó estándares imposiblemente altos para los estudiantes y despreció a aquellos que fallaron en alcanzarlos. Él no toleraba la "flojera"

Y como Hyunjin perdió demasiadas de sus clases y, a menudo no tenía tiempo para completar sus tareas, él era probablemente uno de los estudiantes menos favoritos de Lee si el hombre incluso tuviera estudiantes favoritos.

La posibilidad de Lee permitiéndole alguna flexibilidad era inexistente. Lee no ofreció a nadie cualquier flexibilidad. Sus demandas bordeaban lo ridículo, pero a los ojos del consejo Lee no podía hacer nada mal, ya que obtuvo una gran cantidad de becas de investigación como, un montón.

Hyunjin tenía que dar a Lee el crédito — uno no llegaba a ser un investigador tan altamente respetado para la edad de treinta y tres años, si uno no era increíblemente inteligente, —pero eso no cambiaba el hecho de que el tipo fuera un completo Imbecil.

—¿Qué vas a hacer?— Dijo Seungmin.

—No tengo idea—Hyunjin hizo su camino a sus asientos habituales en el frente de la sala de conferencias: Lee les ordenó a él y a Seungmin sentarse allí todo el tiempo después de que les había atrapado hablando durante su clase.

Hyunjin se sentó y suspiró.

— ¿Qué debería hacer?

—Me gustaría poder ayudarte.— Seungmin se dejó caer en un asiento junto a él. —Pero tu sabes que estoy un poco apretado con el dinero, también.

Hyunjin asintió. Seungmin vivía en la casa de su abuela y la ayudaba como podía. Sus padres trabajaban en otro país y no eran de mucha ayuda.

—¿Qué hay de tu tía?— Dijo Seungmin. —Pensé que ella solía ayudarte a salir cuando las cosas se ponían difíciles.

Hyunjin se detuvo y lo miró.

—Ella murió el año pasado, Min. Te dije eso.

La cara de Seungmin enrojeció de color rojo brillante.

—Mierda, lo siento - No sé cómo yo.

Hyunjin negó con la cabeza.

—Olvídalo. -No es que a Seungmin no le importaba; él era muy sociable y tenía más amigos que Hyunjin conocidos. No es de extrañar que se le hubiera deslizado fuera de su mente.