La llegada de Mateo trajo un cambio profundo en la vida de ambos. Pedro aprendió a equilibrar su vida de artista con su rol como padre, priorizando siempre a su familia. Los primeros meses fueron agotadores, con noches sin dormir y una montaña de pañales, pero ambos sabían que valía la pena.
Lucía encontró en la maternidad una nueva pasión. Aunque siguió trabajando, su principal enfoque se convirtió en su familia, disfrutando cada momento junto a Pedro y Mateo. A medida que Mateo crecía, Pedro le enseñaba a tocar instrumentos musicales, y pronto, el pequeño comenzó a mostrar el mismo talento que su padre.
Unos años después, Lucía y Pedro dieron la bienvenida a su segundo hijo, una niña a la que llamaron Sofía. La llegada de Sofía completó la familia de una manera que ninguno de los dos había anticipado. Ver a Pedro siendo un padre dedicado, cantando canciones de cuna a sus hijos, llenaba a Lucía de una felicidad profunda.
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Entre canciones y sueños (Quevedo)
FanficA veces para conseguir algo te tienes que arriesgar
