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Capítulo 23:

POV Michael:

Ya había amanecido, pero no había podido cerrar los ojos en toda la noche, no después de haber presenciado toda la situación con la mamá de Ruggero y Valentina

Cuando nos dejó solo en la habitación para seguir los pasos de su suegra me imagine lo peor y no estaba tan equivocado pues a los minutos de haberse ido se escucharon algunos gritos que hizo que Freddie se pusiera nervioso y quisiera irse donde su mamá, así que no tuve mejor idea que volver a llamar su atención para que dejara de lado los gritos de su abuela y su mamá, gracias a Dios funcionó y pude distraerlo hasta que Ruggero apareció junto a una Valentina que tenía lágrimas secas en la mejilla que estaba enrojecida, cosa que provocó mi ira pero me contuve, me despedí de mi sobrino y apague la laptop, ahora me daba cuenta que esa señora era lo peor

Macarena se dio cuenta de mi semblante, pero decidí no contarle diciendo que estaba un poco estresado por todos los proyectos que teníamos en la empresa, lo menos que quería era preocuparla con mis cosas, igualmente mi preocupación seguía y no se iría hasta que hablara con Valentina, así que me desocupe lo más rápido que pude del trabajo y sin dudarlo la llame, solo rogaba que me contestara

Un tono, dos tonos, nada, había pasado algo más grave de lo que me imaginaba, espere un poco más hasta que la llamada se descolgó

-hola - escuchar su voz fue como un alivio para mi - Michael

-hola, lo siento por llamar a esta hora, pero es que yo... ayer me quedé preocupado por lo que paso, quería saber si estabas bien

-sí, estoy bien, gracias por preocuparte, solo tuve una discusión con mi suegra - sonrió con enojo - no le gustó nada verte

-debí imaginarme que no sería bueno tener contacto con ustedes si esa señora estaba cerca

-no es culpa tuya, como te dije es tu derecho como tío de Freddie, te prometí que serias partes de su vida y lo voy a cumplir, tengo palabra, me da igual lo que ella piense, Ruggero también está de acuerdo así que no tienes que pensar en alejarte de mi hijo

-no lo iba hacer - escuchar su risa alegró mi tonto corazón- Freddie se ganó mi corazón serio incapaz de separarme de él

-lo sé, lo pude ver ayer, sé que lo adoras y no sabes cómo me alegra

-te puedo hacer una pregunta- dije nervioso

-si dime

-esa señora te golpeó cierto - el silencio que se creó me lo confirmó haciendo que mi enojo creciera

-sí pero también yo la golpee

-que tú que... - dije sorprendido haciéndola reír

-así como escuchaste, dijo cosas sobre Freddie que ni me gustaría mencionar, no pude contenerme así que le di una bofetada, luego Ruggero llego y me saco de ahí

-ya veo, pues sí que se lo merecía, los gritos llegaban hasta la habitación del bebé

-escucho los gritos- hablo asustada y aunque si algunas cosas pudieron a ver escuchado me encargue que lo demás no fuera oído por mi sobrino

-algunas cosas, pero después puse música he hice que se distrajera así que no te preocupes, no escuchamos eso grave que hizo que golpearas a tu suegra

-menos mal, no quisiera que mi hijo escuchara esas horribles palabras nunca, gracias Michael, muchas gracias

-para eso están los amigos, digo podemos serlo ¿no? - murmure sin sentirme seguro de lo que salía de mi boca

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