-DESTINOS ENTRELAZADOS- Fanfic Newtmas
En el corazón de Barcelona, dos almas vulnerables se encuentran en un baile de pasión y dolor. Thomas y Newt, unidos por un destino incierto, descubren en la ciudad un refugio para sus corazones. Pero cuando e...
Estoy a solo dos días de emprender mi gran aventura hacia París, la ciudad donde vive Teresa. Mi emoción crece con cada hora que pasa. Aunque aún estoy asistiendo al trabajo, mi mente ya está en el camino, imaginando todos los momentos increíbles que viviré pronto.
He colgado un letrero en mi casa para alquilarla, es pequeña pero acogedora y ha sido mi refugio durante años. Aunque es algo raro despedirse, sé que este cambio es necesario para encontrar nuevas experiencias y crecer.
De todas formas, no tengo muchos amigos y para ellos tenerme o no es lo mismo. No hay una red de personas que me retenga aquí, que me haga sentir que estoy dejando algo importante atrás. La verdad es que siempre he sido un poco solitario, y esta decisión de irme a París es una oportunidad para reinventarme, para encontrar mi propio camino.
Teresa es la única persona que realmente me entiende, la única que me hace sentir que valgo la pena. Y estar cerca de ella es lo que me impulsa a dejar todo atrás y comenzar de nuevo. Aunque solo será por unos meses.
Todo está listo: mis ahorros están ordenados, mi maleta está empacada y mi corazón late con anticipación. He revisado todos los detalles, desde el billete de avión hasta el alojamiento en el barrio latino.
Ya quiero irme, dejar atrás la rutina y sumergirme en lo desconocido. La ciudad de la Torre Eiffel, del Louvre y del Sena me llama, y Teresa está esperando.
Me imagino caminando por las calles empedradas de Montmartre, descubriendo secretos escondidos en los mercados de antigüedades, probando croissants y café en un café típico parisino y compartiendo risas con Teresa en un paseo por el río. Mi corazón late con emoción, y mi alma está lista para despegar.
Exagero, lo sé.
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Había llegado del trabajo completamente agotado. La jornada había sido interminable, con mi jefe repitiendo constantemente: "Thomas, avanza", "Thomas, los papeles", "Thomas, me traes esto". Estaba harto, pero la perspectiva de mi próximo viaje me mantenía animado.
Después de preparar un sencillo pan tostado con mermelada para cenar, me senté a mi pequeña mesa, acompañado de mi taza de café y mi celular. Pensé que ver algunos vídeos podría ayudarme a olvidar la soledad que me rodeaba.
Una vez que terminé de comer, me levanté para lavar los platos y prepararme para dormir. Después de completar mi rutina nocturna: lavar los dientes, ordenar la cocina y otras cosas. Mi celular sonó.
Sabía perfectamente quién era. Sonreí, esperando unos segundos antes de responder. No quería parecer ansioso, como si hubiera estado esperando esa llamada desde siempre.
-Puedo esperar un poco-. pensé.
Finalmente, contesté.
-Hola- dije, intentando sonar relajado.
Y entonces, escuché la voz que había estado esperando... -¿Estás seguro de esto, Tom?- preguntó Teresa.
-Sí, lo estoy- respondí.
-Está bien, tengo todo listo. No puedes decirme que no después de esto- dijo Teresa con una risa.
-¿Me presentarás a más personas, no?- pregunté.
-Claro, no serás un antisocial aquí- respondió Teresa -Harás más amigos. Yo te ayudaré.-
-Gracias, Teresa. Significa mucho para mí- dije.
-No hay de qué, Tom. Estoy emocionada de tenerte aquí- dijo Teresa -Ya falta poco para que llegues.-
-Sí, solo dos días y estaré allí- respondí.
La conversación entre Teresa y yo fue fluyendo sin cesar, como si el tiempo no existiera. No teníamos un tema específico, pero nuestras palabras fluían libremente, llenando el silencio con risas.
No me había dado cuenta de cuánto tiempo había pasado, en la charla con mi amiga. Pero entonces, Teresa habló.
-Tom, debo irme- dijo con una risita -Llevamos más de 3 horas hablando, tengo ocupaciones, amigo.-
Me sorprendí al escucharla. ¿Tres horas? ¿Cómo había pasado tan rápido? -¿Ya?- pregunté, fingiendo sorpresa -No me había dado cuenta.-
-Sí, ya es tarde- respondió Teresa -Pero ha sido genial hablar contigo, Tom.-
-Gracias por la llamada.- Dije
-De nada, amigo- dijo -Hablamos pronto.-
-Esta bien, yo iré a dormir para el trabajo- respondí
-Buenas noches, Tom- se despidió Teresa.
-Buenas noches, Teresa- respondí, escuchando el tono de llamada que se cortaba.
Y con eso, nuestra conversación llegó a su fin, dejándome con una sonrisa en el rostro y una sensación de calidez en el corazón.
Me quedé un momento en silencio, procesando nuestra larga conversación. Me sentía más tranquilo y emocionado que nunca por mi decisión de mudarme a París.
Apagué la luz y me acosté, dejando que mis pensamientos vagaran hacia el futuro que me esperaba en la ciudad de la luz. Teresa estaría allí, y eso era todo lo que importaba.
La noche se arrastraba con una lentitud agonizante, y mi mente no paraba de vagar. Pensaba en cómo sería mi vida en los próximos meses con Teresa. Cualquiera podría pensar que estoy exagerando, que estoy siendo dramático, pero la verdad es que los últimos cinco años han sido una interminable sucesión de días grises y vacíos. La rutina había se apoderado de mi existencia, convirtiéndola en una monotonía que parecía no tener fin.
Pero ahora, con Teresa todo parecía diferente. Con una sonrisa en mi rostro, me sumí en un sueño tranquilo, soñando con las días que pasaría en París.
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📌. Este capitulo está demasiado corto, lo se. El próximo será mejor, lo prometo!!
