Real Love

03

Mateo

Después de ver a Nicole entrar en su casa camine hasta la mía mientras el silencio reinaba en las calles. Llegué a mí casa unos minutos después encontrándome con gritos.

-¡Mate!-Grito mí hermano menor, Emi.

-¿Que pasa, enano?

-Papá y mamá están peleando, tengo miedo-Dijo entre lágrimas.

-Tranquilo, subí a mí habitación, yo ahora voy, ¿Si?

El asintió y corrió a mí habitación, yo fui a la habitación donde se escuchaban los gritos e insultos. Abrí la puerta y ambos me miraron.

-Mateo, andate con tu hermano.

-¿La pueden cortar? Están asustando a Emi.

-No te metas.

-Me meto todo lo que quiero, yo no quiero que Emi pase lo mismo que yo, ¿Por qué no se separan? Lo único que hacen es crear traumas.

-¡¿De que mierda hablas?!

-¿De que hablo? Era chico, no sordo.

-Mateo, es mejor que te vayas.

-No, me cansé, no voy a dejar que emi pase por esto.

-¿Quien te pensas que sos? Déjate de romper las pelotas, Mateo-Dijo mí papá enojado acercándose a mí.

-Creo que vos no te diste cuenta de que ya no tengo seis años, ¿No entendés que no me das miedo?

-Deberias.

-No me das miedo, ¿Que te pasa, no te sabes controlar cuando estás borracho?

-Mateo, andate -Suplico mí mamá.

-No, el tiene que controlarse.

-Mateo, andate.

Suspiré y me fui, entre en mí habitación donde estaba emi, Me acerque y el me abrazo. Acaricie su espalda mientras el sollozaba.

-Tranquilo, ya está.

-Mate, ¿Me puedo quedar con vos?

-Obvio, enano-Dije y lo agarre en brazos, cerré la puerta detrás de mí y nos acostamos en mí cama.

Emi me abrazo y hablo.

-Gracias mate, sos un superhéroe -Dijo y un nudo se formó en mí garganta.

-Es hora de dormir, ¿Si?

El asintió y dio un par de vueltas en la cama antes de dormirse. Yo no pude hacerlo, no dejaba de pensar en lo que había pasado. Una llamada me saco de mis pensamientos, le dije a Nicole que ya estaba en mí casa y cortamos la llamada. Volví a pensar en las peleas.

Las peleas siempre estuvieron y se que es normal en cualquier pareja pero desde que tengo memoria esto es así. Mí papá no es mala persona, pero cuando toma de más se vuelve todo lo contrario.

A eso de las siete de la mañana dejé mí celular a un lado y me dormi.
A las tres de la tarde me despertó una llamada de Lit.

-¿Que onda gato? ¿Venís a lo de Tuli?

-Eh, si, si, ya voy.

Me cambié y salí, cuando llegue toque el timbre y unos segundos después Nicole abrió la puerta. La saludé y cuando me preguntó que pasaba, no le dije nada y pase por su lado algo enojado.

Después de estar toda la tarde con los chicos volví a mí casa y allí se encontraban mis padres con Emi.

-Mateo, ¿Podemos hablar?