Capítulo 1

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Lunes 27 de junio, 2022
Noche

Llego al baile con mis tres amigas, Sandy, Tina y Kat. La música ya está a todo volumen cuando cruzamos la entrada, y el aire está cargado de energía. Llevo una blusa blanca de mangas cortas y anchas que me roza los brazos mientras camino, y unos pantalones de mezclilla azul corte bota que combinan con mis botas. Me siento cómoda, aunque a ratos un poco insegura. El cabello lo llevo suelto, algo que no suelo hacer mucho, pero esta noche quería probar algo distinto, y en cuanto al maquillaje, apenas me puse lo necesario, nada muy exagerado.

Al mirar a mi alrededor, noto cómo todos parecen estar en su elemento: sombreros, camisas de cuadros y botas por todas partes. Es el típico baile donde todo el mundo parece saber perfectamente qué hacer, excepto yo. No sé bailar muy bien, o al menos eso es lo que siempre he pensado. Además, Josiah, mi novio, me dejó claro antes de venir que no quería que bailara con nadie. Me lo dijo de una forma muy seria, como si pensara que así me estaba protegiendo o algo por el estilo.

Sin embargo, últimamente las cosas entre nosotros no van bien. He empezado a darme cuenta de que Josiah ya no me interesa como antes. No me siento obligada a seguir sus reglas, y aunque sé que él se molestaría si supiera que bailo con otros, algo dentro de mí me dice que necesito esta noche para mí, para sentirme libre, sin darle prioridad a sus expectativas.

Mis amigas no paran de hablar mientras caminamos hacia la pista. Tina dice que quiere bailar con el primer chico que se le acerque, mientras Kat ya está mirando a un grupo de chicos en una esquina. Yo, en cambio, siento ese nudo en el estómago. No sé si quiero bailar, no estoy segura de si me voy a sentir cómoda, pero estoy aquí y algo me dice que debo dejarme llevar.

—Relájate— me susurra Sandy, notando mis manos inquietas—, todo va a salir bien. Solo diviértete.

La palabra "diversión" no parece alinearse con cómo me siento. Sobre todo porque las palabras de Josiah, retumban en mi cabeza: "No bailes con nadie, ¿sí? No quiero que piensen que estás disponible." Su tono protector y la mirada seria cuando me lo dijo no me dejaron espacio para discutir.

Sin embargo, una parte de mí se pregunta si eso es lo que realmente quiero. ¿Es justo que me haya pedido eso? Me siento dividida, entre obedecer y simplemente disfrutar la noche como lo hacen mis amigas.

Me pregunto si alguien más siente lo que yo siento, ese miedo a destacar o a cometer un error.

—Voy por algo de beber— dice Kat, señalando la mesa con las bebidas. Las otras dos asienten y yo solo sonrío, siguiendo a la multitud sin saber muy bien qué hacer.

Minutos después, con un vaso de refresco en la mano, estoy apoyada en la pared, viendo cómo los demás bailan. Me esfuerzo por no pensar en Josiah. Quiero bailar. Lo siento en mis pies, esa pequeña necesidad de moverme al ritmo, de perderme en el ruido y las luces. Pero la idea de hacerlo me congela.

Es entonces cuando lo veo. El chico que siempre me ha parecido atractivo. Su nombre es Thomas, y siempre me ha llamado la atención desde la primera vez que lo vi. Alto, con una sonrisa fácil y esa manera relajada de moverse, como si no le importara nada en el mundo.

—Deberías ir a hablarle— dice Sandy a mi lado, como si leyera mi mente.
—No, no creo...—empiezo a decir, pero antes de que pueda terminar, Thomas se da cuenta de que lo estoy mirando, y en un abrir y cerrar de ojos, camina hacia mí.
—¿Quieres bailar?—me pregunta, como si fuera la cosa más natural del mundo.

Mi primer impulso es decir que no. Las palabras de Josiah vuelven a mi mente, pero antes de poder detenerme, mi boca ya ha dicho: "Sí."

Thomas me toma de la mano y me guía hacia la pista. El contacto de su mano me hace sentir una corriente de electricidad, y de repente me doy cuenta de lo que estoy haciendo. Estoy bailando con otro chico, algo que Josiah me pidió explícitamente que no hiciera.

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