◎Conversación WhatsApp◎
X: Buenos días Celia
Aquella persona no tenía ni estado, ni foto de perfil, asi que no podía saber quien era.
Celia: ¿Quien eres?
X: Perdón, soy Álvaro, de Auryn.
Celia: ¿¡Cómooo!? ¿Álvaro? ¿No me estarás vacilando no?
X: jajaja no, es verdad.
Celia: ¿Y cómo es que tienes mi número?
Álvaro: nos lo pasó Salva ayer. He pensado que si os apetece a ti y a Nuria veniros con David y conmigo a comer hoy, los demás se volvieron a Madrid después del concierto.
Celia: ¡Dios mio, no me lo creo, estoy flipando! ¡Pues claro que comemos con vosotros!
Álvaro: Perfecto. El restaurante le elegís vosotras que todavía no nos guiamos mucho por esta ciudad.
Celia: ¿Quedamos en mi casa y vamos directos para allá?- le di la dirección.
Álvaro: vale, luego nos vemos.
◎Fin conversación◎
-¡Nuriiiiii, vete preparandote porque hoy comemos con Álvaro y David!
-¿¡Queee!?- vino corriendo hacia mi habitación- no me vaciles con estos temas eh.
-Que no te vacilo, que es verdad. Mira- la enseño la conversación.
-¿Pues a que esperamos?, hay que ir preparándose ya.
Me puse una blusa azul, unos pantalones cortos negros y las Vans negras. Me ondulé el pelo, me maquillé y en media hora estaba lista. Fui a ver qué tal iba Nuria. Estaba preciosa, ni muy arreglada ni muy sencilla. La verdad es que en cuanto al estilo íbamos parecidas.
El timbre sonó y Nuria fue a abrir, por su grito defelicidad supuse que los que habían llamado eran los chicos, así que fui corriendo hacia la puerta. Me encontré a Nuria espachurrándoles entre sus brazos sin todavía asimilarlo.
-Nuria por favor controlate, aunque realmente cueste lo suyo...- rectifiqué en mi mente sobre lo que había dicho y no pude aguantarme más, me tiré a abrazarles- ay perdón...
-De verdad, no hay quien te entienda Celia, menuda envidiosa- todos empezamos a reirnos ante la gracia de Nuria.
-Tranquilas si no importa- dijo amablemente Álvaro-, además ya estamos acostumbrados.
-E incluso nos gusta que las fans nos saludeis y nos abraceis, porque eso nos hace darnos cuenta de lo que significamos para vosotras y nos anima a seguir para adelante- continuó David.
-Siento cortar este momento, pero ¿podemos ir yendonos ya? He reservado mesa en uno de nuestros restaurantes favoritos y vamos a llegar tarde.
Nos pusimos en una mesa lo suficientemente discreta para las miradas de las fans.
Comimos entre anécdotas y risas.
-Me ha encantado comer con vosotros chicos- dijo Nuria- habrá que repetir.
-Cuando querais, para los amigos siempre hay tiempo.
- Perdona David, ¿has dicho amigos?
-Claro, vosotras ya soy amigas nuestras.
-Cada vez me encantais más- dije-, y mira que es difícil.
-Pues que no os parezca raro- contestó Álvaro-, sois encantdoras y hemos congeniado bastante bien con vosotras.
-Eres encantador, bueno sois.
-Por cierto, este viernes tenemos un concierto en Logroño, es benéfico pero a lo mejor podemos hacer algo por regalaros un par de ellas. Os lo digo porque Logroño no está muy lejos de aquí y nos encantaría que vinieseis.
-Sería genial- afirmó David.
-Es un gesto muy amable por vuestra parte chicos, pero si es un concierto benéfico no puedo aceptar una entrada gratis- me atreví a decir-. Habéis tenido suerte, sí que puedo ir.
-Yo también puedo ir, pero Celia lleva razón las entradas las pagaremos. Lo siento.
-Está bien, esta vez os librais pero es la última vez- Álvaro me miró divertido-. Lo importante es que podeis ir.
-Avisaré a los chicos- dijo David sin dejar de sonreir-.
Estuvimos hablando durante un tiempo sobre el día del concierto. Nos despedimos y Nuria y yo nos pasamos toda la tarde viendo películas y repasando lo sucedido los anteriores días, parecía irreal, estábamos viviendo un sueño: ser amigas de nuestros ídolos. Estaba segura de que a partir de ahora todo iba a ser distinto, seguiríamos queriéndoles igual pero la confianza y la cercanía nos cambiaría por ejemplo en cuestión a llorar cada vez que les viésemos porque ya estaríamos acostumbradas, aunque apuesto que en los conciertos segiuiríamos emocionándonos y viviéndoles como todos los demás.
