Capítulo 3 ~ Lágrimas de Chocolate y Matemáticas Imposibles

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Me levanté con unas ojeras horribles ya que Sunny no sabe dormir sin roncar.

Tampoco es que haya dormido mucho con el tema de George.

Ese tío lo único que sabe es amargarme la vida.

Lo primero que hice fue ir al baño y asearme. Y luego me lave el pelo rápidamente- porque obviamente soy la mejor- y me hice una trenza espinga. Luego me puse un top bandeau -sin tirantes- de color verde oliva suave y un pantalón jean blanco de campana junto mis nikes blancas con verde.

Me puse un poco de máscara de pestañas, un sutil colorete, corrector y un poco de gloss.

Esperé a que Sunny por fin elija alguna ropa de mi armario que le guste para hoy para bajar a desayunar ya que soy una hambrienta y tengo hambre todo el día.

Sunny al final decidió ponerse un top rosa de tirantes con unos jeans azul oscuro junto unas converse negras.

Ella también se maquillo, pero se puso sombra y delineador.

Después de prepararnos fuimos a desayunar.

Yo me comí dos sándwiches de chorizo y un zumo de naranja recién exprimido, mientras Sunny un bol lleno de frutas.

Hoy fuimos al instituto solo Sunny y yo, ya que Iván se fue con Raquel.

Cuando llegamos sentía una mirada en mí todo el rato. Esa sensación no se fue hasta que entramos.

¿Qué era esa sensación tan extraña?

- Hoy tengo examen de biología y geología - Dice Sunny poniendo una mueca.

- ¿Has estudiado? - Le pregunto.

- Claro que si, no soy como tu. - Me dice con una sonrisa y le pongo mala cara.

Después de eso comenzamos a reírnos.

Fui a mi taquilla para agarrar matemáticas ya que me tocaba a primera hora.

Ew.

Sonó la campana y fui a mi clase.

Me puse en el mismo sitio de siempre y me puse a usar el móvil ya que la señora Beauchamp todavía no llegaba. Miré por la ventana un momento y vi el tráfico que había. Seguro era por eso.

En mi móvil me puse hablar por Instagram con Olivia - una amiga que tengo desde primaria pero que no esta en Pathway-, sobre lo aburrido que es matemáticas, hasta que mi móvil desapareció de mis manos.

Zac Fitzroy.

- Dame mi móvil - Le obligo.

- En clases no se usa el móvil - Me dice mirándome a los ojos fijamente.

Me quede embobada mirando sus ojos ámbar, el tampoco quitaba la mirada. Ahora que me doy cuenta sus ojos son verdaderamente únicos y llamativos. Tienen un color, que se encuentra entre el amarillo y el marrón, brillan con un matiz cálido y profundo, como dos pequeños destellos de oro bajo la luz. Su luz parece invitar a acercarse, transmitiendo una mezcla de misterio y calidez que atrae la mirada sin esfuerzo.

Quite la mirada rápidamente ya que estaba ruborizándome.

- Ya dame el móvil Zac - Digo aún apartando la mirada.

- No...- Se queda un momento callado, la voz ahora la tiene más relajada- Hasta que termine la clase.

Volví la mirada hacia el con los ojos como platos, iba a reprochar pero justo llego la señora Beauchamp.

En el peor momento...

Hicimos matemáticas sin problemas, hasta que la señora Beauchamp saco el tema del trabajo.

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⏰ Última actualización: Oct 08 ⏰

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