☕Coffee, Tea And Wine🍵 [One-Shots]🍷

☕Cigarettes🚬 [Souya Kawata]

Souya Kawata era un chico con dos facetas en si mismo, una de ellas eran Angry.

Angry era el subcomandante del 4 escuadron de una pandilla, parte de los "gemelos del mal", un tipo fuerte que podía romperle los huesos a cualquiera y tenía esa cara de querer matarlos a todos.

Y luego estaba Souya, un chico con cara de enojado pero era tímido y curioso... Tan curioso que miraba por la ventana para ver la ventana de su vecina.

No iban a la misma escuela, eso es cierto, pero en realidad no hablaban nada ni se topaban más que de vez en cuando, siempre estaba... Sonriendo pero sola usualmente, lo entendía después de todo, han pasado cosas raras con ella desde algun tiempo.

Habían visto que llegaron algunos chicos a molestar a su casa y en alguna ocasión le comento a su hermano si era buena idea ir a ayudarlos, pero en algún momento se detuveron.

Lo único que sabe de eso es que de vez en cuando pasan autos blindados por el barrio y Nahoya le dijo que no era buena idea intentar acercarse e investigarlos.

Lo único que sabía de ella, es que si pasaban de las 2:30 am, ella abría su ventana y fumaba... Era extraño, en algún momento en el pasado habían hablado sobre él aroma a los cigarrillos y ella dijo odiar el humo.

Y sin embargo, se paraba por la ventana a fumar, posiblemente sean afrutados por los empaques coloridos como fresa, frambuesa y cereza, aunque las fresas le gustan mucho como el brillo que la a visto usar en sus labios, no está seguro de que le gustaría probar el sabor del humo de su boca.

Aunque siempre la a visto usar ese gloss color rosa cristalino de apariencia encantadora, últimamente se a dado cuenta de que posiblemente se lastimo la boca o alguna otra cosa que explique el porque el color de sus labios ahora eran de un rojo obscuro como las cerezas negras.

En algún momento le hubiera gustado bajar a la puerta y preguntar si estaba bien, quien era el hombre de los tatuajes que la dejaba una esquina antes del barrio en su auto blindado y porque siempre salía a la 1 am y volvía a las 2:30 am para fumar en su ventana.

"No es nada" dijo en una situación cuando volvio tarde junto a su hermano y logro alcanzarla, pero olía demasiado raro, no es que fuera quisquilloso pero en algun momento su madre le a dicho que tenía una buena nariz para detectar aromas, y lo que detectaba ahora era un fuerte olor a abano, algo de alcohol y... Colonia, pero no como una que usaría él, ni siquiera una que usaría Mitsuya o Baji... Era un aroma demasiado fuerte.. como de alguien mayor...

—¿A dónde vas?— pregunto un día de estos cuando se la topo de nuevo.

—Por ahi a pasear— contesto la chica de cabello negro, sus ojos siempre eran negros pero el sabía desde un negro tranquilo (como el de Draken) a un negro tormentoso (como el de Mikey) y a visto la transición de uno a otro en sus ojos.

No dijo nada más porque sabía que ella no quería saber nada más, de cerca pudo ver que estaba equivocado y que ese rojo obscuro era de una tinta de labios que no le quedaba bien.

—Sabes, cuando miras la luna en la noche, es hermosa, no?— dijo suavemente mirándola, realmente se preparó mentalmente para este momento y no lo dejaría ir como así.

—¿Te importa si fumo?— dijo la chica suavemente y el de rizos solo asintió, se quedaron un rato en silencio y volvió a hablar.

—Sabes, cuando miras la luna en la noche, es hermosa, no?— dijo de nuevo esperando una respuesta pero al inhalar se dió cuenta que realmente le desagraba el humo a cigarrillo de cereza.

—Disculpa, me gusta fumar para... Despejarme.— contesto la chica y golpeó la colilla del cigarrillo para quitar la ceniza.

El silencio de nuevo apareció y hablo por una última vez, no podía soportarlo.

—La luna está hermosa hoy, ¿verdad? —pregunto tembloroso está vez, realmente quería estar cerca de ella.

—Tengo que irme, adios— dijo apagando el cigarrillo dejándolo caer de la ventana al suelo.

Solo miró como bajo hasta salir de la casa y fue a la esquina siendo recogida por el mismo auto y el mismo hombre de aproximadamente 30 o 40 llevándola al interior y al irse, aplastar ese cigarrillo a medio terminar.

Y Souya llegó a una conclusión, Algo le pasó a Hanako pero no sabe qué y tampoco sabe si era correspondido.