Capitulo 1.

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El barco de los Piratas del Sombrero de Paja surcaba las aguas del Grand Line, con el sol brillando intensamente. Era un día perfecto para navegar, y la brisa marina llenaba el aire de frescura. Nami, ocupada en la proa, trazaba la ruta del día con su habitual concentración. Sin embargo, había algo diferente en el ambiente. Algo que la hacía sentir nerviosa.

Luffy, como siempre, estaba en su propio mundo, jugando con Chopper y Usopp en la cubierta. Sin embargo, cada vez que miraba hacia Nami, su corazón latía un poco más rápido. Había algo especial en ella que lo atraía, algo que no podía ignorar. Mientras Nami se concentraba en su mapa, Luffy decidió que era hora de hacer algo al respecto.

Luffy:¡Nami!-gritó, acercándose a ella con su característica sonrisa-

Nami: ¿Qué pasa, Luffy? ¿Necesitas algo?-Nami levantó la vista, sorprendida-

Luffy:-Se quedó pensando un momento, sus ojos brillando con determinación-Quiero invitarte a una aventura. Solo nosotros dos-

Nami: ¿Aventura? ¿Qué tienes en mente?-Arqueó una ceja, intrigada-

Luffy: ¡Vamos a explorar esa isla que vimos! Dicen que hay una cueva escondida llena de tesoros-sonrió aún más, una chispa traviesa en sus ojos-

Nami: Está bien, Luffy. Pero solo si prometes que no te perderás en el camino-Sin pensarlo dos veces, Nami sintió que su corazón se aceleraba. Sin embargo, sabía que esta era una oportunidad para acercarse más a Luffy-

Luffy: Ni que fuera Zoro shishi-Bromeo causando la risa de ambos-

Ambos se lanzaron a la aventura, saltando de la cubierta y corriendo hacia la playa. Una vez en la isla, el sol brillaba sobre ellos mientras exploraban la vegetación frondosa y las rocas misteriosas.

Mientras buscaban la cueva, Nami no pudo evitar reírse de las travesuras de Luffy, quien no podía resistirse a jugar con cualquier cosa que encontrara en el camino. Después de un rato, llegaron a la cueva. Era oscura y un poco intimidante, pero Luffy tomó la delantera.

Luffy: ¡No te preocupes, Nami! ¡Yo iré primero!-exclamó el pelinegro-

Con cada paso que daban dentro de la cueva, Nami se sentía más cómoda. Luffy no solo la hacía reír, sino que también la protegía. Al final del túnel, encontraron un pequeño claro iluminado por la luz del sol que se filtraba a través de una abertura. Allí, un cofre antiguo esperaba ser descubierto.

Luffy: ¡Mira, Nami! ¡Un tesoro!-gritó el mugiwara, abriendo el cofre con emoción-

Dentro, no había oro ni joyas, sino un hermoso collar de perlas brillantes.

Nami: Es... precioso-dijo la navegante, sorprendida-

Luffy: ¡Te queda genial!-con su sonrisa deslumbrante, se lo puso alrededor del cuello a su nakama-

El ambiente cambió. Nami se sintió cálida al ver a Luffy mirándola así, con una mezcla de admiración y cariño. Sin pensar, se acercó a él.

Nami: Gracias, Luffy. Por traerme aquí-

En ese momento, Luffy tomó su mano y la miró a los ojos.

Luffy: Nami, siempre quise que fueras parte de mi aventura. Eres importante para mí-

El corazón de Nami se aceleró. Sin poder contenerse, se acercó un poco más.

Nami: Y tú eres importante para mí, Luffy-

El aire entre ellos se volvió denso. Luffy, con su naturaleza despreocupada, se inclinó un poco hacia ella, sonriendo como siempre.

Luffy: ¿Te gustaría ser mi compañera de aventuras para siempre?-

Nami sonrió, sintiendo una mezcla de amor y emoción.

Nami: Siempre, Luffy-

Se abrazaron, y en ese instante, ambos supieron que su vínculo era más fuerte que cualquier tesoro del mundo. Bajo el sol que brillaba a través de la cueva, comenzaron una nueva aventura, no solo como piratas, sino como algo más.

Eres importante para mi. (Luffy x Nami)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora