Mi padre me ha dicho que tiene una noticia importante que darnos. Así que hoy en la noche tendremos una cena formal con Angélica y su familia. La idea no me agrada, para nada, pero como el ha dicho que es algo importante iré sin pelear.
Jonathan ha estado en su habitación, me parece que esta hablando con alguien. Asi que salgo para ver que hay de desayunar y... Sorpresa! Hizo hotcake, aun no me hago la idea de que este hombre es Gay, si no lo fuera sería el hombre perfecto.
En medio de mi desayuno sale Jonathan de su habitación.
-Buen día. - Sonrrie con sus dientes blancos, perfectamente parejos.
-Buen día. - Imitó su acción. - Como dormiste?
-Muy bien.
Al mirarlo puedo notar ojeras en sus ojos que me dicen todo lo contrario. Talvez lo dice para no preocuparme?... Pero no le veo la razón. Será que se ha desvelado con alguien? El siendo Gay y con novio? Talvez, era con quien hablaba tan temprano...
Entre pensando y comiendo olvide preguntarle a Jonathan si ya había desayunando. Pero ese día quería salir a pasear en la ciudad, por suerte ya tenía un vestido nuevo y no necesitaba comprar uno, pero si veía algo por alli lo compraría. En poco rato Jonathan había regresado con un traje todo negro, y es que a mi no me gusta que use traje.
-Hoy iremos a un lugar en especifico?
-Justo eso te quería decir. Quiero dar un paseo por la cuidad antes de ver a mi padre con Angélica.
-Perfecto! Preparare en coche.
-Bien, pero igual quisiera caminar un poco, lo usaremos para ir al centro y de allí caminar hacia las tiendas.
-Me parece bien
Después de salir del departamento nos fuimos por el carro. Jonathan me abrió la puerta y después se sentó junto a mi mié tras cerraba la puerta. Sentado junto a mi parecía inmóvil, mirando a un solo punto, sin ninguna expresión en su rostro.
Después de un rato llegamos al centro, Jonathan y el chófer quedaron de que regresaría cuando terminaremos de comprar.
Mientras yo caminaba entre los estantes de ropa y entraba y salia del probador, Jonathan estaba parado, siempre a un lado, con sus lentes y mirando a los lados.
La verdad era bastante aburrido, muy aburrido, así que pensé en algo para romper el hielo.
-Jonathan, quisiera ir por un helado.
-Bien.
-Pero iré sola.
-Me temo que no se podrá.
-Puedo cuidarme sola, no te preocupes- dicho esto empecé a caminar, claro que sabía que no me dejaría ir y me seguiría.
-No, yo estoy aquí para cuidarte y no te irás a ningún lado sin mi.
En intento tomarme del brazo pero antes que pudiera tocarme salí corriendo. Jonathan me estaba alcanzando así que me metí entre una multitud, mi anatomía pequeña y delgada me permitió deslizarse con facilidad entre la gente, mientras que Jonathan, un chico alto y fornido se quedo atrás mientras me buscaba con la mirada.
Ya que no lo veía más me escondí en una tienda, vi pasar a Jonathan en la entrada de la tienda, rápidamente me metí en un probador y por la cortina vi que el entraba a la tienda, así que cerré la cortina mientras me tapaba ma boca para silenciar mi risa.
-ELIZABETH!!!-solté un grito de sorpresa seguido de una ola de carcajadas.
-Todo esta bien? - Dijo una chica detrás del mostrador.
- Si, gracias - contesto Jonathan mientras me tomaba muy fuerte del brazo. Yo tenia la mano en la boca, intentando calmar mis risas.-Te juro, Pero escuchame Elizabeth, te juro que si me vuelves a hacer esto, me voy a morir- Ya no parecía enojado, más bien aliviado y un poco preocupado.
-Lo siento, solo quería divertirme un poco contigo.
El suspiro- Bien, pero, solo no lo vuelvas a hacer, Aun quieres un helado?
-Solo si comes uno igual, estos son los más ricos que hay.
-Bien- colocó su mano en mi hombro y Caminamos a la cafetería.
En el mostrador había decenas de diferentes tipos de helados, escogí uno con nombre raro, nunca lo había comido hacia que lo probaría, Jonathan miró y escogió, pareciera saber exactamente lo que quería.
Nos sentamos en unas sillas de madera en la explanada de la plaza, mientras comiamos de nuestro helado.
-De que es?
-Es de nuez con caramelo, quieres probar?
Hice una seña con mi cabeza y el hacerco la cuchara a mi cara, yo abrí la boca y cuando me di cuenta tenia helado en toda mi nariz y pómulos.
-Que sucede contigo? -Dije mientras me reía
-Solo quería divertirme contigo-dijo imitandome
-Pues toma esto- llene mi cuchara de helado y como catapulta la lance un su frente.
Jonathan tomo el helado de su frente y me lo unto por toda la cara, salí corriendo mientras el se reía a carcajadas.
-Eres horrible.
-No mas que tu, pequeña mimada.
-Hey, yo no soy mimada.
-Solo estas sobreconsentida.
-Yo...
-Dejemoslo allí, no quiero discutir con una niña mimada.
Y antes de poder decir algo, el ya estaba dirigiéndose al tirar la basura de los helados.
-Toma- saco de su bolsillo un pañuelo
-Gracias.
Después de unos minutos llego el chófer con el coche. Ya dentro del coche Jonathan tenia una actitud muy diferente al de en la mañana, podía ver una sonrrisa en un rostro.
PD. Se que tarde mucho en actualizar, lo siento, me esforzaré por continuar rápido la novela. Les amo.
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El guarda espaldas
De TodoElizabeth es una joven mimada que vive en desorden por la separación de sus padres y la llegada de alguien notan agradable en su vida que pretende quedarse. Una trama llena de celos, mentiras, y corazones rotos.