Si no es contigo, es con tu hermano (Hefesto x Quetzalcóatl)

⚠️[❣].....[3]🔞

Advertencia:
Capítulo un poco más largo de lo normal.

También quiero pedir una disculpa pero es que siendo honesta me tomé mi tiempo porque quería hacerlo lo más bonito posible. Ellos dos me gustan mucho y pues no quería hacerlo tan pervertido xD jsjsjs en fin, espero les guste.

#El que no le de like es g*y :v

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Aquella noche después de nuestro matrimonio, estaba tumbada en la cama de Hefesto. Por supuesto, después de la boda, me encontraba en su casa pues ya iba a vivir con él. Aunque era provisional pues planeaba comprar un departamento.

Intenté calmarme, pero mi cabeza me tumbaba una y otra vez a los nervios. Estuve un rato así, hasta que me levanté de golpe.
—Voy a tomar un baño... ¡Si! Eso me ayudara -dije para correr directo al baño.

En ese momento Zeus y Hefesto se encargarían de agradecerles a los invitados su presencia y los estarían despidiendo.

Lo primero que hice fue apartar todo lo que me estorbaba; El vestido y por supuesto, mi ropa interior. Sin embargo, al hacerlo, recordé que había comprado un conjunto muy bonito de ropa interior sexy. Lo había guardado en un cajón del baño.

—Yo... ¿En verdad lo haré con él? -pense algo nerviosa. Aún seguía confundida, pues muy en el fondo sabía que era un matrimonio arreglado y ya me había resignado a tener a Ares como mi esposo. 

Pero de inmediato, mi lado malo me dió una bofetada y me grito “Deja de pensar en él, ese tipo no te merece”.
—¡No, no no! ¡Yo debo olvidarlo! Ahora debo querer a mi actual esposo -me dije a mi misma mientras me veía en el espejo del baño. Luego me di unas palmaditas en mis mejillas y me dirigí a la tina.

Abrí la llave de la bañera y comencé a verter sobre ella un jabón aromatizante de lavanda. Quería tener un momento de relajación.

Aproveche que el agua seguía llenando la bañera para limpiar mi cara de los kilos de maquillaje que Xochiquétzal había puesto sobre mi piel. Así, una vez que el agua lleno un poco la mitad de la bañera, introjude ni cuerpo en ella.

Pensé que estaría un buen rato en ella, hasta que mi realidad golpeó la puerta del baño. Esa realidad era Hefesto.
—Quetzy -me llamo.-Ya todos se fueron

Él se refería a que mis padres y mis hermanos se habían marchado. Solo habían venido para “dejarme” y verificar que todo estuviera en orden.

No pude evitar ocultar me un poco en el agua, su voz hizo sonrojarme. Luego levanté la cara y hablé:
—Esta bien, en un momento salgo

—Si, tomate tu tiempo -lo escuché decirme. Por el tono de su voz, me supuse que estaba igual de nervioso que yo.

Siendo honesta, me tarde un poco pues quería prepararme mentalmente para nuestro siguiente paso.

Una vez que termine, me prepare para salir del baño. Por supuesto que me puse aquel conjunto, pues quería por fin estrenarlo.

Para salir, me puse mi bata de baño y me deje suelto mi cabello mojado.
—Ya salí ¿Quieres tomar un baño? -dije al ver a mi ahora esposo en la cama. Estaba recostado y jugando en su teléfono. Al verme, dejo al celular a un lado y se levantó.

—Si, gracias -me respondió algo avergonzado. Luego se metió corriendo al baño.

Me apenó un poco, pero no pude evitar quedarme en la puerta del baño. Pude escuchar las gotas de agua caer y escuchar como disfrutaba de su baño.
—¡Quetzy esto está mal! -me dije a mi misma entre susurros.