𝗗𝗲𝗳𝗶𝗻𝗶𝘁𝗶𝘃𝗮𝗺𝗲𝗻𝘁𝗲 𝗺𝗶𝗼 - [Yizhan]

[Siete] : Discusión

Estaba cansado, adolorido y sin ánimos, todavía un poco tembloroso por lo vivido después de la pelea, mientras subía perezosamente los escalones para ir a casa. Traía los audífonos puestos, así que no oía la discusión que se llevaba a cabo a solo dos pisos sobre mi cabeza. Vi a algunos hombres llevándose muebles envueltos, pasando por mi lado como si nada, me quité uno de los audífonos y allí oí claramente, eran mis padres discutiendo, otra vez.

Estaba discutiendo sobre el vestido y la felicidad que alguna vez tuvieron, como sabía que pasaría, me detuve a un lado de la escalera, escuchando: mamá le reclamaba a papá por no traer el suficiente dinero a casa, los muebles eran reciclados de varios sitios, la casa no estaba en las mejores condiciones y siempre comíamos con los descuentos del supermercado. Papá reclamaba por los enormes gastos en ropas y crema que hace mamá, le entrega todo lo que gana a ella, no fuma, ni bebe ni se va con sus amigos y vuelve solo para acompañarla a ella.

Mamá lo interrumpió recordándole el hecho de que no hace nada en la casa, no realiza ni una sola tarea del hogar después de que llega y se sienta en el sillón a ver televisión sin ayudar en los quehaceres ni una vez. Parecía una discusión normal, iba a subir las escaleras para detenerlos, hasta que mamá mencionó que yo era mejor que papá, y que yo debería ser el juez sobre las acciones de papá, me detuve al pie de la escalera solo escuchando: Si, él es mejor que yo. Trabaja horas extras todos los días, come, duerme y se va –dijo papá. – Para él, esta casa es solo un hotel. ¿Quién te acompaña más, él o yo?

Mamá volvió a gritarle: Eso es porque mi hijo tiene un trabajo real –dijo.

– ¿Trabajo real? – repitió papá con enojo.

– Paga la comida todos los meses – gritó mamá. Retrocedí mis pasos, quedándome con ambos pies apoyados en el suelo, decidiendo mejor irme, alejándome cada vez más de esas escaleras, de esa casa, de su discusión. – Él paga más que tú. Si me visto bien, incluso me felicita. ¿Qué pasa contigo? Ni una sola palabra dices, no te importo.

– Ahora entiendo –dijo papá. Metí las manos en los bolsillos, girando el cuerpo para volver a bajar e irme lo más lejos que pueda de ellos dos. – Me menosprecias por no ganar suficiente dinero. Xiao Meijuan, no eras tan materialista cuando eras joven. ¿No crees que es demasiado tarde para menospreciarme ahora? Ya no tengo una vida pacífica.

Ellos siguieron discutiendo cuando yo ya había corrido escaleras abajo, estaba a solo un piso y aun los oía gritar, todos en el edificio los oían, casi corrí el resto del camino y llegue a la estación abordando el transporte, tal vez pueda quedarme en la oficina un poco más. No, el señor Wang claramente sabría que estoy allí y me enviará a casa. No quería estar en casa, no con ese ambiente. Ya suficiente tuve por un día.

Chen seguramente ni siquiera estará de humor para recibirme, y no tiene otra cama para permitirme quedarme. No tenía mucho dinero como para pagar un hotel, así que tal vez pueda convencer al señor Wang de quedarme en la empresa si me lo permite, al menos por una noche. No pude evitar dormirme en los asientos, mientras estos se mecían suavemente a medida que avanzábamos; Cuando llegó a la estación, el vehículo deteniéndose me despertó.

Baje rápido, pasándome los dedos por los ojos para quitarme algo del cansancio y caminar las pocas cuadras que me separaban del enorme edificio, todo estaba a oscuras, a excepción del lobby que era el único lugar con luces encendidas. Intenté entrar, pero las puertas claramente estaban cerradas para impedir que alguien quisiera entrar. Suspire desanimado, esta fue la única idea que tuve de camino aquí, sacando mi teléfono para abrir rápidamente el chat del CEO Wang Yibo.

Me detuve antes de escribir, no quería molestarlo a esta hora con todo lo que había pasado el día de hoy, mire hacia el edificio, después alrededor, tenía mucha hambre y no había muchos puestos de comida cerca. Recordé el bar del joven Wang, así que rápidamente corrí para tomar el transporte al restaurante de la otra vez donde fue la cena de bienvenida, no estaba lejos, así que tenía que guiarme por los edificios ya que no había memorizado el lugar.