El Último Acto de Valor

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En un pequeño pueblo de Reino unido, un grupo de personas apuntaban sus armas a hombres, mujeres y niños, cada uno de ellos arrodillados en el barro rogando por su vida desesperadamente. Talvez por la desesperación no notaron que estos hombres estaban nerviosos y alertas, como si esperaban que algo, un suceso, que les causaba desesperación.

Una mujer del pueblo que rogaba en el suelo miro a su hijo al lado, sabía que en ese lugar estallaría la guerra por la expresión se sus opresores. Con su mano llamo la atención de su hijo con delicadeza y lentitud, señalándole un pequeño hueco debajo de la casa con la esperanza que su hijo entendiera el mensaje.

su hijo asustando la miro con miedo, percibiendo lo que su madre quería hacer, con su mano el agarro su falda no queriendo perderla de su lado. La madre vio esto y lo vio a los ojos con una sonrisa sabiendo que sería el último día que vería a su hijo, miro su hijo por última vez y con todas sus fuerzas envistió a uno de los hombres delante de ella, causando un gran alboroto.

Su hijo a su lado salió corriendo con lágrimas en los ojos al lugar señalado cumpliendo la última voluntad de su madre. La madre golpeo con desesperación al hombre más fuerte y grande que ella intentando distraerlo todo lo posible. El sujeto la golpeo varias veces intentando alejarla de el, pero ella seguía luchando con todo su aliento.

Otros hombres armados dándose cuenta de la situación ayudaron a su compañero, uno de ellos agarro a la mujer por el pelo para con fuerza la estrello contra el piso y darle una pada en la boca quebrándole la nariz a la mujer. Este grito del dolor y miro a los ojos al hombre con un gran odio, el hombre sonrió para luego apuntar su arma a la cabeza de la mujer.

-Muere perra- PAAA un disparo se escuchó por la zona y una persona murió.

No fue la mujer, si no el hombre que ahora se encontraba en el suelo. PAAA otro tiro volvió a sonar y otro hombre armado callo. El Lugar quedo en silencio, todos impactado por la escena, PAAA, PAAA, PAA, los disparas empezaron a llover desde la distancia cada uno de estos llevándose una vida con ellos.

Los hombres armados asustados empezaron a huir y a ocultarse, BOM, una explosión sonó desde un lado, 4 carros blindados entraron destruyendo todo en su camino las puertas se abrieron y de ellas bajaron hombres fuertemente armados que empezaron a abatir a los malhechores.

De estos hombres uno se destacaba, preciso, despiadado y ágil, un maquina de matar para algunos dirigió la ofensiva y acabo a todos los presentes.

-buen hecho muchachos, recorran el área por si alguno se escapó- este soldado se relajó y miro a los de su equipo, los cuales pasaron a su lado y siguieron explorando la zona.

-tu nuca cambiaras, Arthur- un soldado lo saludo divertido y feliz- siempre ten preciso y feroz, siento envidia de ti sabes- ríe un poco

- tu siempre sientes envidia Maikel- sonríe - no tienes que ir a supervisar a los nuevos, o ya están lo suficiente preparados

- pues ya pueden hacerlo todo por ellos mismos, yo solo estorbaría con mis viejos huesos y mi mente de anciano

- cuanto tiempo hemos hecho esto hermano- lo mira nostalgia- ya son 20 años no?

- 20 años, y míranos dos ancianos poderosos con fuerza a un acabando con enemigos internacionales- golpea el hombre de Arthur – sigues igual de musculoso desde aquel día que te conocí

- ya sabes mala yerba no muere, pero para ti ese dicho es mas realidad que para mi

- jajajaj, talvez

- vamos a supervisar a los nuevos que puedes hacer un erro y ya sabes es Natalia-

Los dos hombres siguieron el mismo camino que los demás alcanzándolos y apoyándolos desde la distancia, mientras exploraban una casa encontraron a un hombre armado bebiendo con tranquilidad y paciencia, cosa que los extraño mucho.

-saben me hicieron esperarlos por mucho tiempo en este lugar- sigue bebiendo una botella de licor, ignorando todas las armas que le apuntaban a la cabeza. Arthur y Maikel lo miraron serio intentando descubrir que tramaba este tipo- no sabes cuánto tiempo de espere Arthur o mejor dicho halcón negro.

- ríndete o morirás - Arthur lo mira serio y serio, ya que algo no le gustaba de esta situación

- eso no se va a poder- levanta un mano la cual tenía un botón rojo, este estaba presionado por su dedo- esto que ves aquí es un botón que al soltarlo activara lo explosivos debajo de esta casa y matara a una familia atrapada debajo de esta.

Maikel serio- que quieres para dejar a esa familia libre- le ase una seña a sus subordinados para que se alejen más del lugar.

-acaso no es obvio- señala con enojo y agresividad gritando- ¡quiero ver muerto al halcón negro!, después de todo tiene una deuda muy grande con la muerte el día de hoy

-¡Imposible!, pide otra cosa bastardo- enojado respondió Maikel apuntando su arma a la cabeza del bandido y miro de reojo a su compañero al lado-Arthur que asemos, si lo matamos la familia muere

- puede alguien del equipo ver a la familia- Arthur con su comunicadora pregunta molesto

-si señor, una madre con dos niñas- Mikel miro a un más enojado al tipo, y dirigio su mirada a su amigo- que asemos

- démosle lo que quiere- con rapidez Arthur empieza quitarse todo su equipo- estás loco- Mikel lo miro enojado y con temor conociendo la actitud de su amigo- si entras morirás, porfavor piénsalo mejor Arthur.

- ya lo pensé, y es la única solución. Amigo mío les das un saludo de mi parte a tu familia- mira a los ojos a Mikel y le da una pequeña sonrisa- porque ases esto- Mikel con lágrimas en los ojos lo agarra de lo hombros y lo sacude

- debo de pagar por mis pecados cometido, y se que este es el momento para eso- rie un poco- cuídate envidioso- abraza a su hermano de armas y empieza a caminar a la casa, el hombre al ver esto sonríe con excitación y deja escapar a la familia cuando Arthur está en la puerta de la casa.

- no huiste-lo mira con una mezcla de enojo y felicidad- crees que no te reconocería, Michael- Arthur lo mira a los ojos, agarro una silla y la coloco enfrente del hombre para sentarse- sabes cuánto lo siento yo no quis-

- Esa es una excusa de ¡MIERDA!, tú vistes a mi familia y los dejaste morir en el fuego que tú mismo causaste – agarra la botella de licor y empieza a beber como un loco hasta acabarla- mínimo acepta eso – dice enojado

- entonces lo aceptare, los deje morir, mientras te casaba a tí- lo señala- Un maldito parasito que se aprovecha de los débiles.

le escupe a la cara y le saca el dedo de en medio- vamos al infierno ya - suelta el botón en sus manos

BOMMM

Toda la casa en donde estaban los dos se hizo pedazos en segundo, matándolos a los dos. Mikel que vio esto desde la distancia sentado en el suelo, levanto una mano al cielo- hasta pronto viejo amigo- llorando y riendo al mismo tiempo.

El protector del Hijo de DiosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora