𝐄𝐥 𝐚ñ𝐨 𝐞𝐧 𝐞𝐥 𝐪𝐮𝐞 𝐝𝐞𝐣é 𝐦𝐢 𝐜𝐨𝐫𝐚𝐳ó𝐧.- J.G

𝐩𝐫𝐨𝐥𝐨𝐠𝐨

-Eres el único hombre que aguantó tantos años, Choi Seungcheol —pronunció una voz a través del teléfono.

El mencionado solo suspiró mientras veía de forma borrosa su departamento; a oscuras, lo único que se escuchaba era el latido de su corazón, ahogado en súplicas.

-¿Hice algo mal? ¿No fui suficiente? —La voz de Minji sonaba apagada, casi al borde del llanto.

-Minji, yo tampoco quería esto. Deja de verme como el villano. ¿No te basta con haber hecho que mis propios hijos me odien? —respondió Seungcheol, mientras tomaba el último sorbo del vaso de whisky—. Ambos fallamos. Desperdiciamos el tiempo de lo que supuestamente era nuestro matrimonio.

-¿Supuesto? ¿Alguna vez tuvo significado para ti nuestro matrimonio?

Seungcheol soltó un último suspiro. No pudo contener un reclamo ante lo que, al principio, solo parecía una despedida. ¿Cuándo mierda había logrado tener tanta paciencia con quien fue su esposa? Nunca lo entendió. Nunca se detuvo a analizar el hecho de que se derrumbaría con una última discusión. Ni siquiera se anticipó. Solo lo dejó pasar, una y otra vez.

-Tuvo algún significado... cuando olvidé que todo fue planeado. —Colgó al instante.

Dejó el celular sobre la mesa del comedor. Con los ojos cristalinos, a punto de estallar, miró la nota que había leído cuando llegó del trabajo.

"Tus hijos y yo nos fuimos a casa de mi madre por unos días. No quiero que cuando regresemos estés aquí, por favor."

—Kim Minji

Prácticamente lo habían echado de su casa, pero no refutó nada, porque sabía que en el proceso legal habían acordado que la casa quedaría a nombre de Minji por tener la custodia de los menores.

Eran las 11 de la noche, pero no se dio cuenta hasta que comenzó a empacar sus pertenencias. La llamada con Minji había hecho que esos minutos se sintieran eternos; aun así, no quiso colgar tan pronto. No quería enfrentar la realidad: el amor de su esposa y de sus hijos había desaparecido.