Magia

Al amor de Á

Esta carta no está dirigida a Á, sino a quien ahora tiene la dicha de tener a Á en su vida.

Si has logrado tener esa magia a tu lado, no la sueltes jamás. No cometas el error de dejar ir a una persona tan especial. Ama a Á con cada fibra de tu ser, quiérele como nunca has querido a nadie. Á lo entrega todo por amor. Aunque pueda hacer un pequeño berrinche porque gastes en sorpresas, le encantan los detalles inesperados, grandes o pequeños. Puede ser tan feliz con una simple nota como con un ramo de flores, pero nunca le des flores comunes. Sorpréndele con flores únicas, mágicas, como la esencia que lleva dentro.

En las mañanas, no busca besos intensos, pero llena su rostro de piquitos y deséale buenos días con ternura. Fíjate en sus pequeños detalles personales, en su forma de ser. Y si no lo haces, te ayudo un poco: Á siempre amanece con la ceja derecha despeinada, y cuando está nerviosx o molestx, suele morderse el labio inferior. Aunque pueda avergonzarse de su sonrisa, créeme, una vez que la veas, quedará grabada en tu corazón para siempre. Sus ojos... sus ojos. Cuando se le achinan al sonreír, es como si el mundo se llenara de luz. Son tan expresivos, que si te miran enamorados, habrás ganado el cielo.

Á ama tener el cabello ondulado, aunque yo amo cuando lo lleva lacio. ¿Y tú? No sé qué amarás, pero te aseguro que encontrarás algo único en cada uno de sus detalles.

Tienes que cuidar de Á siempre, yo lo hubiera echo si hubiéramos compartido más en persona, cuidado con las esquinas de las cosas cuando camina por ahí por que siempre choca con cosas y se hace morados en los pies, nunca nadie lo entedería.

Á adora la música. Si puedes, dedícale todas las canciones de amor posibles. Yo ya le gané algunas, pero ahora te toca a ti descubrir nuevas que puedan cantar juntos. Le encanta cantar y bailar, y esos pequeños bailes improvisados cuando está feliz son tesoros que atesoraré siempre.

Es una persona muy familiar, siempre cuidando de sus seres queridos: hermanos, padres, abuelos, sobrinos. Lo mismo hará por sus amigos. Si alguien necesita ayuda, no dudará ni un segundo en ofrecerse.

Á es transparente en lo que le gusta. Sus preferencias son fáciles de notar, pero presta atención también a lo que es por dentro, a su esencia. Porque si está contigo, es porque ya ha superado muchas cosas. Aprende de sus comidas favoritas (odia el huevo), de cuándo tiene hambre o frío. Vive con sueño, pero si no duerme todo lo que puede, puede ponerse de mal humor. Le encantan los postres, la comida ecuatoriana, y conmigo probó cosas nuevas. Ahora te toca a ti llevarle a lugares diferentes y presentarle nuevas experiencias.

Á ama las fechas especiales: Navidad, su cumpleaños, o el día en que se conocieron. Haz que cada una de esas fechas sea inolvidable. Si puedes, haz que cada día se sienta especial. Anota el día del primer beso, del primer "te amo", o cualquier detalle importante. Si en unos años se lo recuerdas, le harás muy feliz. Sé su cómplice en sus batallas, en sus sueños, en sus metas. Apóyale siempre, porque tiene todo para ser lo mejor. Y sé su fan número dos, porque yo, desde siempre, seré su fan número uno.

Tenle paciencia en los días malos, o cuando haga pequeños berrinches. Complácele, porque jamás te pedirá nada que no merezca. Siempre pensará en ti antes de pedir algo, incluso lo más mínimo. Como te dije, ama las sorpresas, y las guardará en su corazón por siempre, especialmente cuando no sean en fechas especiales.

Á es color rosa. Si llegó a tu vida, la pintará de ese color, dándote todo lo bello y dulce que representa. Pero ama a Á en cualquier color, porque cuando sea azul o negro, también necesitará tu amor. El negro representa su fortaleza, el rosa su esencia. Y yo podría contarte de todos los colores que lleva dentro, pero mejor te dejo que los descubras por ti mismo. El verde agua y el amarillo son míos en su historia, porque representan lo que fui en su vida.

Si, después de conocer a Á de esta manera, estás dispuesto a amarle con todo tu corazón, te lo ruego: hazlo. Ama toda su magia, porque si lo haces, te agradeceré por siempre. Estarás amando también la magia de mi vida.

Con respeto,
Quien siempre ha amado la magia de Á.