No le preste atención a lo que decía Nejire ya que estaba pensando en que tal vez Tamiaki me odiaba y eso no me gustaba era por así decirlo uno de mis primeros amigos. Como avordar el tema sin molestarlo.
-Después de esto deveriamos salir a comer, si no es problema.
-Eh no si no les molesta por mi esta bien.
-Perfecto entonces, por cierto cuantos años tienes
-Cumpliré 11 dentro de poco
-Y que aras después de la secundaria.
-Eh no estoy segura. Aunque de seguro me obligarán a hacer algo contra los héroes y demás.
-Oh bueno nosotros 3 nos convertiremos en héroes no es así. Después de esa declaración. Mi corazón se paro por un segundo no quería enfrentarme a ellos en guerras de héroes y villanos, no quería ser enemiga de estos dos en especial. Salimos del lugar y nos dirigimos a una cafetería, donde había un montón de dulces con pinta deliciosa, aunque me decante por el pastel de fresas y nata aunque si fuera por mi me pediría toda la carta. Para mi suerte si traia dinero, que me dúo kurojiri, desde pequeña savia miu bien el valor de este y tenía mis ahorros en un cuenta en el extranjero.
-Al parecer te gustan mucho los dulces
-Eh bueno nunca había probado nada tan bueno. No sabía peoque pero me sentía avergonzada. Ambos se rieron
-Bueno pues si no desapareces otra vez te traeremos aquí siempre que quieras.
-Bien y a que escuela de héroes entrareos
-U.A por supuesto después de todo seremos los mejores no es así. Un si de los dos chicos uno más entusiasta que el otro. Supongo que esto es lo que hacen los adolescentes normales y no tienen que entrenar tanto.
-Nunca respondiste cual era tu peculiaridad.
-A bueno puedo crear cualquier arma.
-Y como funciona
-Bueno tengo que deber todo del arma, su peso el tipo de vals que usa etc... para hacer una pequeña demostración hice que una pequeña pistola de bolsillo apareciera
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-Gua es relamnete pequeña no sabia que existían armas tan pequeñas, es un quien impresionante, pero las balas tiene que ser vayas de verdad. Bueno eso esra un punto interesante ya que nunca lo había pensado, después de todo siempre creaba balas de verdad.-Bueno siempre podemos intentarlo será integrante no creen.
-Eh si pero será otro día ya que se está habiendo tarde Tamaki deverias acompañarla a casa. Estaba un poco enojada ya que no sólo no la dejaron pagar su parte sino que tampoco la dejaron irse sola a casa era indignarse pero bueno eso me dio la oportunidad de hablar con Tamaki a solas. En vez de a casa lo dirigí a un bosque para hablar con él.
-Esto Tamaki tengo que preguntarte algo, me gire a mirarlo y le queremos el molesto flequillo de los ojos cosa que era un poco complicado ya que era más alto que yo pero demasiado vi como estaba rojo pero no le di importancia.-Lo que te quería preguntar es si no te gustó, digo si me odias o algo.
-No mo te odio-dijo tan rápido y algo que me sorprendió un poco. Lo mire a sus ojos negros para ver si mentía, pero no había rastro de mentiras aunque había algo más allí.
-Por un segundo pende que me odiaba o algo, suspire aliviada y sonríe. Sabes deveriad cortarte el pelo a como lo tenias antes, te quedaba bien. Antes de que el pudiera respondercallo al sileo y si estapalsa estaba sagrado, rápidamente encontré al agresor y acabe con el. Fui a ver a Tamaki que estana arecosstaso en un árbol, lo tebia que llevar a un hospital, pero eso ocasionaría, preguntas y a la policía. Le rasge la camiseta para ver mejor el daño para suerte de todos no había perdonado
-Lo siento Tamiki esto te va a doler un poco, use unas pincas improvisadas para sacra la vela, solo esperaba es esto fuera suficiente, use las mangas de mi camiseta para vendar la herida, luego abría que cogerla aunque se me ocurrió una idea, aunque tal vez no funcuone muy bien.
-Esto Tamaki pues escucharme tendríamos que coser la herida, quieres que lo haga de dolerá muchísimo y puede que ko quede perfecto.
-Confío en ti se que lo podrás hacer bien- dijo débilmente asique empecé mo sabía si esto saldría bien pero en sí a esto se lo podía considerar un arma no digo podías matar con hilos lo sisuficientemente gruesos y una aguja tan fina aunque después de esto seguro no me podré mover en un tiempo me dejo agotada y empecé a coser como podía u envolvía la herida, me desmalle poco después. Y no me desperté hasta el día siguiente
Me levante con un fuerte dolor de cabeza, revise como estaba Tamaki.
-Esto Tamiko que haces.
-Revisar tu herida no es obvio, además por mi culpa es que estas así espero no haberte metido en problemas.
-No te preocupes es sábado, ademas mis padres no están en casa pero que hay de ti. No me avía parado a pensar en esto seguramente me espere una tortura o algo similar, aunque realmente no me importa.
-Será mejor si te acompaño a casa hay podré limpiar tu herida. Salinos del bosque a paso lento y llegamos a la casa de Tamaki estaba un poco bastante lejos. Era una casa de 2 plantas bastante bonita.
-Bueno será mejor verte esa herida-Dije siguiendo a Tamaki hasta su cuarto.-Tienes un botiquín-Pregunte mirando al chico que parecía estar tenso y algo nervioso fue a buscar un botiquín o eso pensé. Abri el pequeño botiquín y saque unas tijeras cortando las ataduras y mire la herida.
-Esto te va a doler un poco, vende el lugar y lo oblige a tumbarse en la cama y mi plan era irme cuando el se durmiera, pero al parecer estaba cansada
Poco después me desperté con una sabana a mi alrededor, mire por ña ventana y ya casi estába anocheciendo, me lavente y baje las escaleras rápido, chocando con alguien.
-Veo que estas despierta-dijo un hombre enorme de pelo negro me recordaba un poco a ese hombre con lo grande que era
-Oh veo que te despertaste- esta vez hablo un mujer de pelo azul y ojos negros, veo de donde saco sus orejas
-Siento la intromisión mi nombre es Tamiko Kanroji, hice una reverencia
-Me alegra que mi hijo haya echo una amiga señorita Kanroji, mire a la mujer que tenía una especie de brillo en sus ojos
