El ambiente era inusualmente tranquilo. Irónicamente eso solo hacía que Hadie estuviera más alerta. Estaba acostumbrado al ambiente hostil de la isla, donde no se podía bajar la guardia en ningún momento, a menos que quieras perder la poca comida o dinero que le robaste a alguien más
Lo único que parecía mantenerlo tranquilo era ver la figura de su hermana menor a lo lejos. Estaba con el principito, quién le estaba enseñando a jugar en extraño juego que los de Aburridon llamaban "Croquet"
Solo estaba parando contemplando el panorama. Mal no era la única que parecía estar ablandando en este nuevo ambiente, sus amigos también había logrado enfocar su atención en nueva actividades que jamas hubieran podido hacer o disfrutar en la isla
En el fondo incluso se sentía mal por ser el único desadaptado que aún no ha encontrado ese algo que lo motivará a abandonar ese plan malvado que rondaba en su cabeza desde que salieron de su hogar. Nada parecía estar haciéndolo dudar de sus intenciones, y eso le preocupada aunque se negará a admitirlo
¿Su hermana y amigos seguirían siendo igual de felices si robaba la varita y destruía la barrera?
Antes pensaba que no había más alternativa para ellos. Que la única forma de obtener su felicidad era destruyendo a los habitantes de Auradon, a todos esos príncipes y princesas que condenaron a sus padres a vivir en un basurero de mala muerte con sus sobras
Pero ahora con el nuevo noviazgo se su hermana todo parecía cambiar. Aunque al principio ella solo quería utilizar a Ben para ayudarlo con su cometido, Hadie se daba cuenta que su pequeña e ingenua hermana había caído en el error de enamorarse de ese princeso, cosa que muchas veces antes de le había advertido
Mal no lo admitía, pero Hadie no necesitaba que lo hiciera. Ese mismo brillo que tenía en los ojos cada vez que hablaba o veía a Ben, era sin duda el mismo que sus padres tenían cada vez que se veían con aquella complicidad que Hadie siempre admiro. Esas sonrisas eran las mismas llenas de alegría y devoción que sus padres se entregaban todos los días al despertar
La felicidad de Mal estaba garantizada si decidía quedarse con el hijo de Bestia. A si mismo, Mal podía llegar a convencer a sus suegros y a su novio de abrir la barrera y liberar a sus padres
Eso era todo lo que el buscaba, la felicidad de su familia. Es uno de esos casos en lo que haces lo incorrecto por las razones que crees correctas
En el poco tiempo que llevo en Auradon, pudo darse cuenta que estaba equivocado en algo más. Si, había hijos de héroes como la hija de Aurora o el hijo mayor de Cenicienta que eran exactamente como se imaginaba a los jóvenes de Auradon, con una total hipocresía y una vanidad mas grande que sus cerebros
Pero también estaba Sarah
La descendiente de Rapunzel fue la primera en hacerle tener una visión diferente de la realeza
Tal vez haya sido por sus encantadores hijos verdes, o por su rubio cabello que parecían cortinas amarillas que caían de su bella cabeza y que siempre era decorada por un bello moño rosa, que Hadie simplemente no podía sacarla de su cabeza
Supo que sacarla de sus pensamientos serie un problema desde la primera vez que sus ojos verdes claro lo vieron caminando por los pasillos de la academia Auradon. No había desprecio ni recelo, su dulce mirada angelical parecía ser inmune a todos esos sentimientos despreciables. A diferencia de sus amigas, quienes hicieron muecas de miedo y desagrado en cuento lo vieron pasar junto a ellas, la rubia le regaló su más sincera sonrisa, mostrando sus dientes más blancos y limpios que su conciencia. Noto como su inocente mirada lo persiguió hasta que cruzo las puertas del pasillo y se adentro en otro
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What if....?
FanfictionA veces los villanos no son tan crueles como los pintan los cuentos de hadas, que son contados por los héroes Pequeños relatos de una familia en la que a menudo tienen que soportar las malas condiciones en las que fueron destinados a estar. Pero q...