Noche de selección, entrevistas y stream

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-Chau muchachos, gracias por estar del otro lado.- Sacudo  la mano delante de la cámara para terminar de saludarlos.- Cuidense, adiós.

Ahora sí corto la trasmisión y se los dejo a otro streamer, luego de verificar que esté todo en orden, volteo la cabeza hacia mi costado y ahí esta, recostada sobre la silla en silencio esperando a que termine mi trabajo.

Una ligera sonrisa baila sobre sus labios,y es dirigida hacia mi, puedo leer el orgullo en su mirada.

-¿Ya está?.- Ya a esta hora su voz es perezosa.

-Si, ya terminé.- Inmediatamente de mi contestación, palmea su regazo, invitandome.

Abre los brazos para recibirme y yo gustoso me siento sobre el con la piernas para solo un costado, me aprieta fuerte contra su pecho, dejo caer mi cabeza sobre su hombro largando un largo suspiro, ahora si en casa luego de este hermoso pero interminable día.

-¿Estás feliz?.-Ya me habia preguntado eso míl veces en el stream, pero estaba la pequeña diferencia de que ahora estábamos a solas, a puertas cerradas.A

-Si, ¿Cómo no voy a estar feliz? ¡Dios! Conocer a Messi y todo lo que pasó hoy.- Levanto la mirada desde mi posición para poder ver su rostro.- Fue un día increible y todo gracias a vos.

-No fue gracias a mi, vos lo hiciste solo.

-Pero vos estuviste en cada paso alentándome, en un principio, vos literalmente me dijiste que a hacer.

-Pero no estuve cuando hablaste con el.

Ahora sí despegó mi cabeza de su hombro para poder agarrar suavemente su rostro entre mis manos y hacer que su mirada se fije en mi, este hombre era un terco de mierda pero era mi terco.

-Solo acepta mi agradecimiento, forro.- la mirada en su rostro hacia que se asiente en mi estómago un cosquilleo de esos agradables.

-De nada, amor.- Responde luego de unos segundos, su mirada se desvía hacia mis labios, sus pupilas se dilatan, mostrando hambre, en respuesta lo único que puedo hacer es besarlo o lo único que quiero hacer en realidad.

Cierro la distancia entre nosotros, besándolo como corresponde por primera vez en todo el dia, ya que hoy por la mañana se fue apurado murmurando en un tono enojado algo que no llegue a escuchar y solo alcanzo a chocar nuestros labios bruscamente antes de salir corriendo por la puerta.

Gastón me acomoda sobre su regazo, poniéndome a horcajas, y comienza a intensificar el beso, su lengua pide permiso para entrar a mi boca, lo que concedo, subiendo el tono del beso y luego de unos minutos mi cuerpo empieza a levantar temperatura poniéndome medio duro

Me separó rápidamente al recordar el itinerario de mañana, pero la mirada de confusion en su rostro me dice que el no lo recuerda, el no podía quedarse hasta más tarde.

-Tenes que descansar, flaco, mañana trabajas y cuando dormis poco te pones de mal humor y no sabes lo que decís.- El abre la boca y por como levanta una de sus cejas seguramente para contradecirme.- No me lo podés negar, lo vivo de primera mano cada vez que te pasa.

-Esta bien, puede que sea un poco así pero tampoco para tanto.- Ahora yo levanto una de mis cejas cuestionandolo.

-Yo me la banco pero mañana vas a estar en vivo, la gente ahora te funa por todo.

-Esta bien, termina de comer.- Reprocha apuntando con su mandíbula la comida rapida sobre el escritorio, como si se me iba a olvidar eso.

Intento levantarme para sentarme en mi silla, y es un intento porque sus manos en mi cintura son como piedras, no me suelta.

-¿Me dejas levantarme para poder comer?.- Mi voz sale en tono burlon, causa gracia como se contradice el solo.

- No es necesario, acomodate que yo te espero.

-¿Seguro?- Cuestionó pasando una mano por su pelo, acariciándolo repetidamente. Se ve cansado y no dudo en decírselo.- Te ves cansado, amor.- no hace ni un cambio en su postura, solo me abraza más fuerte, nunca me podría quejar de eso pero necesita descansar.- Estuviste trabajando todo el dia, dale, anda a acostarte.- Insisto.

-No, hoy te extrañe mucho, ademas no pude estar mucho tiempo con vos mientras cumplas uno de tus sueños y de verdad quería estar con vos en todo momento.-Me lo dice de manera lenta, dulcemente y yo solo quiero comermelo entero.

-Dios, sos un empalagoso, no sé cómo no ganaste Bake off.

- ¿Ves? Así sos, yo me pongo mimoso y vos te burlas de mi.- Su tono de voz demuestra que esta un poco indignado pero su sonrisa no abandona su rostro mientras comienza a picar mis costillas.-Así no se puede, así no.

Trato de alejar su mano mientras me acerco nuevamente a su rostro y para distraerlo lo beso para que deje de picarme.

-Perdon, perdón, sabes que te amo y amo que seas un empalagoso.

-Si, si, seguro, dale acomodate y come.- Un bostezo le gana en mitad de la oración, así que sin discutir me doy vuelta posiciónandome aún arriba de el hacia delante, con su brazo envuelto en mi cintura.

Termino de comer sentado sobre el mientras el boludea por Twitter, mostrándome uno que otro meme del partido, le insisto para ir a acostarnos una vez que tiro todas las cajas a la basura pero pone un poco de resistencia porque que no deje que la comida bajara un poco, pero termino ganando o simplemente lo deja estar ya que está muy candado.

El ya esta bajo las sabanas esperando a que apague la luz y qué ponga cargar el celular, cuando me meto en la cama y me doy vuelta en su dirección, sus brazos me arrastran hacia el para acurrucarme al lado suyo con mi cabeza a la altura de su pecho, a veces siento que soy un osito de peluche para el.

-¿Pusiste la alarma, amor? No vaya a ser que te quedes dormido.- Le recuerdo entrelazando nuestras piernas.

-Si, ya está.- Responde besando mi frente, asiendo que suelte un suspiro, estoy hasta las manos con este hombre.- Ahora descansa, te amo.

-Yo tambien.

Puede que hoy haya conocido en persona al mejor hombre del mundo para muchos, pero en realidad, para mí, el hombre que esta durmiendo a mi lado es el mejor del mundo

PUERRUL ESPECIALDonde viven las historias. Descúbrelo ahora