Jake se recuesta en el sofá con los brazos cruzados, observando a Sunghoon con cautela mientras el alfa permanece sentado frente a él, con las manos entrelazadas.
El apartamento está en silencio, salvo por el leve zumbido del refrigerador y el latido acelerado en los oídos de Sunghoon. Sabe que, si había un momento para abrirse, es este. Respira profundamente y deja que las palabras fluyan.
—Jake... necesito que entiendas algo importante sobre mí —Empieza, su tono más suave de lo habitual—. No soy un alfa cualquiera. Soy... un alfa de pura sangre.
Jake lo mira sin decir nada, procesando lo que acaba de escuchar. Conoce el significado de esas palabras. Un alfa de pura sangre es una rareza, alguien casi legendario, una mezcla perfecta de genética, fuerza y linaje.
Muchos de ellos se convertían en líderes de grandes familias o manadas, y todos esperan que formen alianzas con omegas igualmente selectos, asegurando así la pureza del linaje.
—Eso no es lo que esperaba escuchar —Murmura Jake, arqueando una ceja.
Sunghoon esboza una sonrisa triste. Sabe que esa revelación solo despertaría más dudas en el omega, pero está decidido a ser completamente honesto.
—Lo sé. Pero quiero que sepas que, desde que tuve la edad suficiente para entender lo que significaba ser un alfa de pura sangre, decidí que no me dejaría llevar por la presión de la sociedad ni por las expectativas de mi familia. Me presentaron a decenas de omegas perfectos, de las mejores familias de Corea. Candidatos cuidadosamente seleccionados, cada uno más encantador y deseado que el anterior. Pero no... ninguno de ellos me hizo sentir lo que tú me haces sentir.
Jake parpadea, sorprendido por la sinceridad en las palabras del alfa. Sunghoon baja la mirada por un momento, sus dedos temblando levemente mientras continúa.
—Esperé, Jake. Esperé toda mi vida por alguien especial, alguien que pudiera llenar ese vacío en mi corazón. Rechacé a cada pretendiente porque nunca sentí esa conexión real que siempre supe que debía existir. Me dijeron que estaba loco, que era un idealista, que perdería oportunidades importantes. Pero no me importó. Aguanté todo porque quería encontrar a quien realmente fuera para mí.
Los ojos de Jake se suavizan, aunque sus labios siguen apretados en una línea fina. La barrera que había construido durante tanto tiempo empieza a desmoronarse lentamente, aunque se niega a admitirlo.
—Y luego... llegaste tú —La voz de Sunghoon casi se quiebra al decir esas palabras—. Sin anuncios, sin pretensiones. Tu aroma, tu esencia... Eres todo lo que había soñado y más. No sé cómo explicarlo, Jake, pero en el momento en que te percibí, supe que toda mi espera había valido la pena.
El silencio vuelve a apoderarse del ambiente, esta vez más cálido, más íntimo. Jake baja la mirada hacia sus manos, sintiendo cómo su corazón se encoge y se expande al mismo tiempo. Hay algo indescriptible en las palabras de Sunghoon, algo que lo hace sentir expuesto y protegido a la vez.
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𝐃𝐞𝐬𝐭𝐢𝐧𝐞𝐝
Fanfic𝐍𝐨 𝐭𝐞𝐧𝐢́𝐚 𝐬𝐞𝐧𝐭𝐢𝐝𝐨 𝐬𝐞𝐠𝐮𝐢𝐫 𝐞𝐬𝐩𝐞𝐫𝐚𝐧𝐝𝐨 𝐩𝐨𝐫 𝐥𝐨 𝐦𝐢𝐬𝐦𝐨... 𝐂𝐮𝐦𝐩𝐥𝐢𝐨́ 𝐥𝐚 𝐦𝐚𝐲𝐨𝐫𝐢́𝐚 𝐝𝐞 𝐞𝐝𝐚𝐝 𝐲 𝐧𝐨 𝐜𝐨𝐧𝐨𝐜𝐢𝐨́ 𝐚 𝐬𝐮 𝐝𝐞𝐬𝐭𝐢𝐧𝐚𝐝𝐨 𝐜𝐨𝐦𝐨 𝐬𝐞 𝐥𝐨 𝐡𝐚𝐛𝐢́𝐚𝐧 𝐩𝐫𝐨𝐦𝐞𝐭𝐢𝐝𝐨, 𝐪𝐮...