°EXPLICANDO EL PASADO.°

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Stolas se encontraba reflexionando sobre la situación, releyendo la carta que seguía en sus manos desde yacía días.
Millie se encargaba de hacerle llegar esas cartas lo cual agradecía mucho.

La ventana del hospital, alojaba las sangrientas escenas que pasaban en las calles.
Detrás de él, la puerta se abrió.

—¿Stolas?¿Podemos pasar?

El demonio aviario volteo rápidamente.

—¿Asmodeo?¿Fizzarolli? ¡Claro! Pasen.
—No esperamos molestarte Stolas.— Habló piadosamente Asmodeo.
—No, no, para nada. Realmente ya me estaba aburriendo.
—Bueno, ¿Fizz, cariño, nos puedes dejar solos?
—Esta bien Ozz.— El ex-bufón se retiró.

Stolas miró consternado la escena, y con ayuda de Asmodeo regresó a la camilla del hospital.

—¿Porqué...?
—Ah...? Bueno, quiero hablar contigo Stolas. ¿Qué tal te sientes?
—Realmente bien ¿A qué la pregunta?
—Es que tengo un tema muy serio el cual hablar contigo.
—Bueno pues habla.
—Es sobre Blitz...

Stolas no dijo ni una palabra, pero sin duda quedó confundido. Trató de balbucear algunas palabras sin esperanza alguna. Y una lágrima comenzó a correr hacia su mejilla.

—¿Sabes algo sobre el...?— Su voz se quebró a la última Sílaba.
—Si..., mucho. Pero lo que tengo que decirte no es algo bueno, y tú padre, tu hija, y todos los que te conocen, me han dicho que trate de explicarte un poco de la situación primero. Antes de darte el golpe.
—¡Es algo delicado! ¡DIMELO YA!
—¡Stolas! Calmate o no diré nada. Si venimos aquí es porque nesecitas saber la verdad.
—¿Venimos? ¡Ah! ¿Todos están aquí.
—Tu hija..., Loona, los empleados de I.M.P, Fizz... Venimos para darte la noticia.

Stolas sintió una puñalada en el pecho, y rápidamente miró hacia enfrente, ignorando la preocupación de Asmodeo. Miró hacia un cajón en donde tenía todas las cartas de Blitz.

Miró hacia afuera de la ventana, hacia el portal entre el cielo y el infierno...

Lastimosamente, no podía llorar más allá de pensamiento, los cuales atravezaron su mente como balas, destruyendole toda esperanza que le quedaba sobre volver a verle.

—¿Blitz...?

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