Es cosa del colegio.

Capítulo 1

Lunes, primer día de clases ¿Puede haber algo peor? Creo que no.
Suena la maldita alarma y me levanto, despierto a mis queridisimos hermanos y me arreglo para ir al colegio ( bueno, no tanto que digamos, ya que siendo sinceros, es solo la escuela, no una pasarela de modelaje).

Al estar listos vamos al colegio ya que vivimos relativamente cerca, tengo tres hermanos, los tres menores a mí, mi hermano que es un año menor a mi, que se llama Carlos, mi hermana, dos años menor a mí, que se llama Paula, y mi hermanito menor quien es seis años menor a mi, se llama Roberto.

¿Y yo? Bueno, mi nombre es Isabel Cárdenas, tengo quince años, y eso es todo lo que se debe saber de mi. Al llegar al colegio nos dirigimos a nuestros cursos, este año no me tocó con mis amigos, así que, vamos a ver que tal todo.
Matemática a la primera hora, genial, entra el profesor y se presenta.
-Buenos días alumnos, yo seré su profesor de matemática este año de clases.
A lo largo del día, varios profesores se presentan, algunos comienzan a dar clases desde ya, otros dicen que esperarán hasta el siguiente día.
A la hora del recreo, me encuentro con mis amigas, Daniela y Samantha.
-Hola chichas, odio ese maldito curso, es H-O-R-R-I-B-L-E
Mis amigas se ríen.
-Pero que exagerada eres, no puede ser tan malo, enserio.- dice Dani.
-Tiene razón, no puede ser tan malo, quien sabe y hasta te gusta.- la apoya Sam
-Malas amigas, les digo que es cosa del diablo, no conozco a nadie ahí, claro, como ustedes personas con suerte les tocó juntas, ¿y saben que es lo peor? El cabron de él noviesito de mi hermana está en mi curso, agh, les dije, horrible.
-Ya bueno, tal vez, si es un curso un poquito, tantito, malo, pero no tanto, vamos, no exageres.
-¿Yo? ¿exagerar? ¿Cuándo?
-En este preciso momento. -ese fue mi mejor amigo, Danilo.
-Malo, malvado, te burlas de mi sufrimiento, disfrutas de mi desdicha.-eso lo grito, y todos me regresan a ver. ¿No lo dije? Estábamos en mi curso, moriré, pronto.
-Y dice que no exagera...
-Yaya mejor, me invitas a comer, ¿siiiii? Andale que yo te amo casi tanto como a Patch

Después de comer volvemos a nuestros cursos para recibir clases, al llegar a casa mis padres me preguntan cómo me fue en el colegio, y sigo que bien, por la tarde, yo, tranquilamente conectada, cuando me escribe un idiota de mi curso.

-Hola
-Hola
-Como stas?
-mmmm bien ¿y tu?
-Bien, oye, Qué hay de deberes?
-Nada idiota, es el primer día de clases
-Ok

Imbecil. Cuando da la noche me dispongo a dormir, maldito primer día de clases.