Notas de interacción AA

Sueño retrospectivo

Los dos continuaron practicando durante aproximadamente media hora, y el cielo gradualmente se volvió amarillento. Xu Yan se detuvo para estirar los dedos y al mirar su reloj se dio cuenta de que ya era hora de cenar. Después de despedirse, se puso la mochila al hombro y salió del aula de música para ir al comedor a comer.

Ye Yang lo observó salir y al darse la vuelta vio a Yan Qi todavía concentrado en su tarea, sin intenciones de irse, por lo que decidió no molestarlo y continuó practicando un poco más.

La cálida luz amarilla del atardecer se deslizaba lentamente de izquierda a derecha por la ventana, haciendo que el interior se oscureciera cada vez más. Ye Yang pasó una página de la partitura y de repente, la mitad del banco del piano se hundió un poco, al voltear vio a Yan Qi sentado a su lado.

"¿Qué pasa?" Ye Yang sonrió, preguntándole, mientras volvía a colocar los dedos en las teclas del piano.

Ambos habían crecido juntos, tan familiarizados que no necesitaban prestar atención el uno al otro, estando juntos incluso en silencio sin sentirse incómodos. Al ver que Yan Qi también colocaba sus manos en las teclas, Ye Yang se dio cuenta de inmediato: "¿Quieres aprender?"

Los dedos de Yan Qi eran largos y delicados en comparación con los de Ye Yang, pero igualmente hermosos y definidos, y con algo de base, aunque no podía seguir completamente el ritmo, podía tocar siguiendo la partitura. Sin embargo, debido a los errores de tiempo, sus manos a menudo se rozaban con las de Ye Yang de manera intencional o involuntaria.

Ye Yang decidió detenerse y colocó su palma sobre la mano de Yan Qi para guiarlo en la interpretación.

Al escuchar la pregunta, Yan Qi bajó la mirada y miró las manos que cubrían la suya en ese momento, y de repente habló: "¿Cómo es el marcador del libro que mencionaste?"

Al escuchar esto de repente, Ye Yang se detuvo momentáneamente y tocó una nota incorrecta.

A pesar de la interrupción, Yan Qi continuó tocando el piano mientras seguía hablando: "Anoche encontré un papel, lo guardé en mi bolsillo, ¿puedes ver si es eso?"

"..."

La situación dejó a Ye Yang aturdido por un momento, pero al ver la expresión tranquila de Yan Qi, sintió un leve alivio.

Después de un rato, Ye Yang finalmente escuchó su propia voz diciendo: "Sácalo para que lo vea".

Yan Qi levantó ligeramente las cejas y señaló con la mirada y los dedos aún en las teclas del piano: "En el bolsillo izquierdo del pecho, sácalo tú mismo".

"..."

Si no fuera porque Yan Qi seguía tocando el piano, casi podía asegurar que estaba siendo coqueteado.

En otras ocasiones, cuando Yan Qi no podía hacer algo con las manos ocupadas, a menudo le pedía a Ye Yang que revisara sus bolsillos, pero nunca de una manera tan sutil como ahora. Ye Yang movió los dedos, e incluso notó que la palma de su mano estaba un poco húmeda por el sudor.

A medio camino con la mano levantada, Ye Yang no pudo evitar preguntar: "¿Ya lo sabes?"

"¿Saber qué?"

"...Nada".

Si Yan Qi ya lo sabía y aún así lo estaba molestando de esta manera, sería verdaderamente malo.

Ye Yang pensó en eso y sacó el papel del bolsillo del pecho de Yan Qi. Al abrirlo, recordó que este chico siempre había sido un poco travieso.

Algo no estaba bien, esto no estaba bien.

De regreso desde la sala de música, el hermano Ye parecía distraído mientras se sentaba frente a su escritorio con un cuaderno de tareas y no había dicho ni una palabra durante un buen rato.