✰Watafak? -✟Híbrid mode✟-✰

Perro

Cap. 10

𓆩✞✩Narra Gustabo✩✞𓆪

Desperté lentamente, una sala blanca y luminosa cegando mi vista, la verdad no me ayudaba mucho, sentí un dolor de cabeza terrible y puse una mano allí mientras me levantaba del suelo con cuidado.

Cuando recuperé del todo mi consciencia, pude darme cuenta de dónde estaba, y en dónde no.

Busqué cualquier cosa con la mirada, era una habitación parecida a la de un manicomio, con un gran cristal negro para mí, polarizado, suelo, paredes y techo blancos y acolchados, del mismo material y dos camas blancas que parecían unas nubes, pero que realmente no creía eso al pensar en donde estaba.

En una cama habían dos personas que no conocía y parecían totalmente dormidas, estaban acurrucadas entre sí. En la otra cama estaba Horacio, la cama era bastante más pequeña que la otra, así que solo cabía él. Suspiré aliviado al saber que estaba conmigo, pero temí que le hiciesen algo en el lugar en el que estábamos. Pero...cómo habíamos llegado aquí? Intenté hacer memoria hasta que conseguí recordarlo todo, Maldita. Vieja. Traidora.

La rabia me invadió y un gruñido se escuchó en la sala, me asusté y miré a todos lados en busca del proveedor del sonido, pero luego me di cuenta de que había sido yo mismo, ignoré eso y fui a la cama de Horacio. Le sacudí un poco para despertarle, al ver que no pasaba nada, por instinto me acerqué para poder escuchar si respiraba o su corazón latía. Por suerte sí lo hacía, así que lo moví de nuevo. Se despertó un poco agitado.

-Q-Qué?- tembló, me vió y me abrazó fuerte- Gustabo! Tengo miedo Gustabo, dónde estamos?- se levantó con mi ayuda y se apegó a mí-

-Shh...!- le callé rápido al ver que su chillido estaba despertando a los otros-

Horacio ahogó un grito y lo puse detrás de mí por si necesitaba protegerlo de algo.

-Por cierto, ahora eres un perro- susurró despacio-

Asentí a la información sin quitar la vista de un chico rubio que se estaba levantando. Se sentó y se pasó la mano por los ojos, cansado. Cuando los abrió, pareció quedarse en shock al vernos y miró todo el lugar, claramente desconcertado.

Yo di un paso atrás para apartar a Horacio y él me miró y se asustó cuando miró mi cola y...y el resto. Miró a su compañero y lo movió repetidamente hasta que este se despertó con un quejido.

-Joder, Toni- se quejó el rubio cenizo, sentándose junto a él- Qué quie- no acabó la frase al ver en dónde se encontraban, nos miró a nosotros- Dónde estamos? Quiénes sois? Qué...eres?- la última de sus preguntas desconcertantes era especialmente para mí-

No respondí, solo protegí aún más a mi hermano. Se miraron entre sí y el de pelo rubio un poco más claro al mío se levantó despacio. Se acercó cuidadosamente a nosotros.

-Emm...hey, hola, me llamo Toni Gambino, y él es mi hermano Carlo, quiénes sois vosotros?- preguntó indeciso sobre qué decir-

-...Hola, soy Horacio- respondió tímido-

-Oh, encantado Horacio- sonrió un poco y le acercó la mano para estrecharla-

Me asusté y me aparté más con un gruñido, Horacio se quedó entre la pared y yo. El rubio cenizo se acercó igual por si acaso pasaba algo y debía intervenir.

-Eh, relájate, sólo quería saber vuestros nombres- defendió el otro-

-Carlo, no- le regañó Toni-

-Gustabo...- me habló Horacio-

Me aparté un poco de él y se puso a mi lado.

-Lo siento, esque está un poco asustado y es muy desconfiado- aclara él-