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Vacío.

Oscuridad.

Flotando en la nada.

¿Dónde estoy? ¿Qué hago en este lugar? ¿Cuánto tiempo estuve aquí?

Y una mejor pregunta… ¿quién soy?

No podía sentir nada, ni ver nada cuando desperté. Solo estoy flotando por ahí sin saber que hacer.

O eso fue hasta que de repente, una fuerza desconocida me hizo caer bajo el efecto de la gravedad.

¿¿??: ¡¡AAAHHH!!

Caí hacia quien sabe donde en este vacío. Pero pronto el lugar se abrió, como si un portal me hubiera jalado hacia él.

Y antes de darme cuenta, caí de espaldas contra el duro suelo.

¿¿??: Auuu… Creo que caí de pompis sobre mis llaves --- gemí de dolor.

Ni siquiera sabía que tenía llaves en mi ropa y en bolsillo trasero. ¿Por qué lo tengo guardado ahí?

Esperen, ¿salí de ese vacío en donde estaba?

Me senté de golpe y miré mis manos. Al verlas, supe que de verdad salí de ese lugar oscuro. También, me di cuenta que mis manos son más pequeñas de lo que pensé. Incluso siento que mi cuerpo es más joven, como de un joven de quince años.

¿Qué está pasando?

¿¿??: ¡¡URGH!!

Muchos recuerdos aparecieron en mi mente en un instante.

Ahora lo recuerdo. Yo soy… Dante… hijo de Sparda. Definitivamente no nací en este lugar y… ¿Acaso he muerto?

Recuerdo que estaba en una gran batalla… y luego…

Dante: Ugh… Mi cabeza --- hice una mueca de dolor mientras intentaba recordar lo que sucedió en esa batalla --- Había… un dragón creo. Y también… ¡Ah! ¡¡CHICOS!!

Golpeé el suelo con ambas manos y me puse de pie de un salto.

Dante: ¡Ahora lo recuerdo! ¡Mis amigos! ¡Rias! ¡Issei! ¡Asia! ¡Y los demás!

Desesperadamente miré a todas partes con la esperanza de verlos por ahí. Pero lo único que veo es que estoy rodeado entre un montón de árboles.

¿Estoy en un bosque?

Es no importa ahora. Saqué de mi bolsillo mi celular. Y como temía, no hay señal.

¡Mierda!

[}-O-{]

Me pasé todo el día intentando volver con mi habilidad de teletransportación, pero no ocurrió nada. Incluso intenté usar a Yamato para cortar el espacio y abrir una dimensión para volver a casa, pero tampoco funciona.

Lo único que podía hacer es hallar el pueblo más cercano y preguntar por la civilización.

Gracias a Dios que mis armas todavía estaban conmigo. Habría sido un problema perderlas luego de todo el trabajo que hice para tenerlas.

Por suerte encontré un camino de tierra que me llevó fuera del bosque. El sol estaba en su punto más alto y

Y mientras caminaba, dejé de hacerlo cuando escuché movimientos entre los arbustos al costado del camino. Y también escucho… ¿sonidos de llanto?

Sigilosamente me acerqué a los arbustos y me adentré al bosque otra vez.

Me tomó solo unos segundos encontrar la fuente de ese llanto. Una niña de cabello corto y blanco, que tiene probablemente unos siete u ocho años estaba sentada en el suelo con su espalda apoyada en un árbol. Abrazaba sus rodillas contra su pecho mientras hundía su cabeza en ellas.

El hijo de Sparda (OC X Fairy Tail)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora