Tenia miedo, si miedo, el por mucho que fuera el invencible Mikey, le tenia miedo a los fantasmas, y más si estaba solo en casa, Emma había ido a una pijamada con sus amigas y Shin se había quedado en la casa de su novio Wakasa.
Y el acababa de ver una jodida película de terror, porque baji le había retado y según sus propias palabras no le tenia miedo a nada, y ahora mírenlo, tieso en la cama porque acaba de escuchar pasos en el pasillo que da a su habitación.
Lo primero que pensó fue llamar a ken-chin y justo fue lo primero que hizo.
—Ken-chin— Llame con un tono de voz infantil para no mostrar mi miedo —que mierda quieres maldito enano, son las 3 de la mañana, acaso no duerme— su voz ronca y algo enojada se escucho atreves del teléfono —¿Puedes venir a la casa?— puede ser que eso se escuchará como una pregunta, pero en realidad era un orden —Ya voy para allá— después de eso colgó.
Espere aproximadamente 26 minutos, cuando escuche la puerta principal ser abierta, y unos pasos apresurados hacia mi habitación, veo como se entreabre la puerta, mientras escondo mi cabeza bajo las sabanas. La voz de ken-chin me hace destaparme para verlo parado cerca de los pies de la cama .
—viste otra película de terror— pregunto serio sin ni siquiera saludar —ken-chin acaso no saludas —hable burlón, mientras el me miraba irritado, suspire y susurré avergonzado — no me quería quedar solo— el me mira de arriba a abajo sabiendo que miento y suspira y sin decir nada, me hace una señal para que le diera un poco de espacio en la cama, lo cual yo obedecí rápidamente.
Se acostó alado mío y se voltio disponiéndose a dormir —ken-chin, no veremos películas o que— dije bromeando, cuando él voltio su cabeza y me miró molesto— Duerme de una puta vez— cuando regreso a una posición cómoda, me acosté a su lado, quedándome dormido al instante.