Marca de un héroe -HIATUS-

Capítulo 24: ¡Que comience el festival deportivo!

Había pasado una semana desde que Midoriya comenzó a entrenar, tanto para suprimir sus nuevos poderes empáticos como para prepararse para el festival deportivo.

El entrenamiento de supresión había ido decentemente, aunque todavía había algunos problemas. El ectoplasma tenía un límite en la cantidad de clones que podía hacer, y habían llegado al punto en que la greenette podía resistir la inundación de emociones erráticas y enfocadas de los 36 clones a la vez, aunque todavía terminó con un horrible dolor de cabeza que se sentía como si Bakugou hubiera alcanzado activamente la cabeza de los niños y explotado su cerebro desde ambos lados. Si pudiera desarrollar una tolerancia y hacer que el dolor bajara a un nivel más manejable pronto, entonces eso era lo mejor que podía esperar para seguir participando en el festival deportivo.

Su entrenamiento en el frente de Far Reach fue mucho más errático. Ectoplasm había acordado ayudar a acostumbrarse a su nueva forma de Far Reach para la seguridad de los otros estudiantes, y hizo todo lo posible para ayudar al niño marcado con su variante más débil (que todavía era un dolor para ponerse a trabajar. Al menos podía sostenerlo durante unos segundos antes de que se disipara por completo, pero todavía era una molestia y nada utilizable todavía.)

Una vez que el niño marcado pudiera usar esos poderes de manera segura, no obtendría más orientación del maestro de matemáticas hasta que terminara el festival deportivo, debido a que es 'cheating' según Ectoplasm.

Midoriya acababa de terminar otra sesión frustrante de tratar de convocar la versión debilitada de sus zarcillos y fallar, durante la mayor parte de una hora. No tener éxito, no importa cuánto se centró en el poder que estaba poniendo en él, no fue muy bueno para su confianza en sí mismo.

Cuando salió del gimnasio, se encontró cara a cara con otra fuente de frustración que había estado enfrentando recientemente.

"Heya Deku!" Llegó la alegre voz de Uraraka y levantó la vista para ver a su grupo de amigos esperando para caminar a casa con él. Todavía se sentía culpable de que estaban perdiendo el tiempo que podrían haber estado usando entrenamiento en él, pero habían insistido en ello.

Mientras miraba entre ellos, su empatía estalló como siempre parecía hacerlo cada vez que sus ojos escaneaban a Hagakure mientras una gran cantidad de preocupación lo bombardeaba. Él había estado preocupado la primera vez que sucedió, pero cuando él había tratado de confrontarla, ella simplemente había evitado las preguntas que le hizo.

En menor medida, también fue un escenario similar con Jirou, aunque al menos no negó que estuviera asustada, aparentemente tanto por el festival deportivo como por la revelación de que había personas que querían lastimar a la greenette, por lo que no podía culparla.

Tampoco eran los únicos rompecabezas emocionales confusos. Desde que había desarrollado adecuadamente su nuevo poder, se había dado cuenta todos los días que iba a recoger más y más episodios de ira inexplicable. Al principio había pensado que era Bakugou, quien el adolescente marcado hizo todo lo posible para evitar canalizar por su propio bien, pero finalmente se demostró que estaba equivocado cuando Bakugou se quedó en casa un día y la ira persistió.

Después de algunas 'pruebas rigurosas' (aka, solo tratando de no quedar atrapado declarando atentamente a todos), finalmente se dio cuenta de que era el siempre estoico Todoroki. Mientras que el intrest de la greenette alcanzó su punto máximo, sabía que tratar de hablar directamente con el niño sería quizás aún más inútil que preguntarle a Bakugou sobre sus emociones.

Aparte de eso, sin embargo, el nuevo poder de Midoriyaia no había sido tan malo, incluso si era raro. Mientras no canalizara a Mineta en ningún momento, con suerte seguiría siendo el mismo.