Jueves, 25 de diciembre de 2014, 8:40 a. m.
-Navidad, navidad, hoy es navidad, es un día de alegría y felicidad!
Villancicos por aquí, villancicos por allá. ¿Qué no se cansaran de estar cada año cantando la misma mierda en todas las navidades?
No es un día de alegría, ni mucho menos de felicidad. Cuando te has enterado que tu vida esta contada y que no vivirás más de un mes del año 2015, pero... ¿Quién sabe que la maravillosa Leah, esta pudriéndose por dentro?
Todos me ven, me saludan y actúan como si fuéramos amigos de toda la vida. Y lo único que yo veo es hipocresía por todos lados...
-¡Leah! -Grita Marcel corriendo hacia mi. -Espero y no se te haya olvidado la fiesta de fin de año, es en casa de...
-Rebeca, si, lo sé. Me lo has dicho más de 5 veces en está semana.
-Claro, sí, yo...
-Adiós Marcel.
Grosera, tal vez un poco, pero no interesa, de todos modos no tenía ganas de hablar.
Jueves, 25 de diciembre de 2014, 7:30 am
Iba entrando al hospital en el cual me habían hecho mis exámenes de sangre, los cuales hago cada año mes para checar mi estado de salud.
En los años que he vivido, he salido bien y no tengo preocupaciones, pero nunca pensé escuchar a mi doctor diciéndome:
-Leah, siento mucho informarte esto, pero tus exámenes han tenido un problema...
No pude escuchar más de toda su palabrería. Nunca me creí sus "lo siento" ni nada por el estilo, es decir, no soy la primera persona al tener una enfermedad como ésta.
-Doctor, -dije un poco molesta. -Vaya directo al grano, ¿qué enfermedad tengo?
-Cáncer, Leah.
Y así fue como mi mundo se fue cayendo poco a poco.
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Short StoryFeliz año nuevo Leah. -Me dije a mi misma. - Disfruta tu último mes en este mundo.