-Tanto demoraste.
Y ahí estaba otra vez, buscando tener explicaciones de algo ilógico.
-Ni es tarde, estaba esperando el bus.
-Hubieras llamado y te mandaba a recogerte.
-No pienso pelear por cosas absurdas -suspira- iré a acostar al niño.
-Todavía no hemos terminado de hablar.
-Basta Dottore, no he hecho nada para que busques pelear -dice para luego retirarse.
Lo deja en la sala.
Neuvillette estaba feliz, su pequeño niño por fin había salido de la manada y aunque todavía es pequeño sabe que tiene que aprovechar mucho su tiempo.
FLASH BACK
-Es niño -dice la doctora- felicidades.
Habían ido al doctor por constantes malestares y por el extraño aroma que salía del omega mayor.
Aunque Neuvillette sabía lo que le pasaba, no quería decir nada o al menos que alguien lo note.
-Estoy feliz.
La sonrisa del alfa no desaparecía.
-No pensé que realmente te alegría tener un hijo.
-¿Bromeas? Mi futuro niño, desde pequeño le enseñaré como administrar la manada.
-No lo harás , es un niño.
-Basta -levanta la mano para que se calle- mi hijo será un gran heredero, es mejor formarlo desde pequeño, porque después crecen y se pueden revelar contra uno.
-¡No!-grita- mi hijo va a disfrutar su niñez, no puedes obligarlo a hacerlo.
-¿Quien eres? -lo mira con algo de desagrado- solo era mi omega y como te dije, no tienes derechos sobre los cachorros y sabes bien.
Neuvillette sabía que tenía razón, lamentablemente Sumeru se basaba en esos principios, los alfas siempre se encargaban de criar a sus hijos. Pero el omega tenía todo el derecho de apoyar al alfa , pero mayormente los omegas eran enviados a realizar labores de la manada.
-En la constitución dice que el omega tiene derecho a sus cuidados hasta que cumpla seis año y luego si alfa decide si el omega lo ayuda a criar o lo manda a un área a realizar tareas -lo mira - así que legalmente tengo derecho a criarlo y no puedes prohibirlo.
-Pues legalmente tienes razón, pero solo te ocuparás de él hasta que cumpla los seis, no haré nada por ahora hasta los seis.
El omega suspira, pero igualmente no puede ocultar su cara de preocupación, no quería dejar a su hijo solo.
-Como pude acabar así...
EN LA ACTUALIDAD
-No dejaré que nadie nos separe -susurra- ni tu padre lo hará, siempre voy a buscar lo mejor para ti.
-Nevillette.
