Liu Qingge y Shen Qingqiu están destinados.
Son una pareja omega/alfa.
Es bueno que Liu Qingge se entere, pero es malo que Shen Minghu, el señor del Pico Qing Jing, pueda matarlo por intentar robarle su repollo dulce.
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Antes de que pudiera volver a su punto máximo, el Señor de la cima de Qian Cao lo detuvo para revelar más sobre su condición física. "Shen Shixiong, Shen Shizi, hay algunas recomendaciones que deben tener en cuenta a partir de ahora".
Shen Qingqiu no quiere estar allí, pero no tiene otra opción, ya que están hablando de su vida personal. Sabe que es importante saber su situación, pero...
"Primero, debes interactuar más con tu familia marcial y con aquellos que están más cerca de ti. Sería muy beneficioso tener más intimidad con otros omegas. Ayudará a tu omega a desarrollarse mejor y más rápido y también podrían guiarte en algunos... problemas omega. Como médico, puedo ayudarte con eso si tienes alguna pregunta puntual, pero también podrían mejorar tu comprensión de los cambios por los que pasarás". Es extraño escuchar a un alfa hablar sobre los problemas típicos de los omega, pero Jing Minghoa es un hombre maduro y médico, por lo que lo toma bastante bien. Shen Jiu asiente para mostrar su comprensión.
"Además, odio decirte esto, pero deberías aprender a controlar tu olor y tus feromonas antes de acercarte a cualquier alfa. Por supuesto, con la excepción de tu pareja predestinada y probablemente Shen Shixiong. Sería mejor si al menos uno de ellos estuviera a tu lado en todo momento. Necesitamos prevenir accidentes".
"¿Se espera que esto suceda en los Omegas recién presentados?", pregunta Shen Qingqiu porque ninguno de sus hermanos o hermanas marciales necesitaba hacer eso. Ni siquiera entre los mortales o las cortesanas.
—No, no es... normal. —El médico frunce el ceño y mira a Shen Minghu pidiendo ayuda.
"Tiene miedo de que alguien quiera reclamarte. Qingqiu, temo que tu aroma sea como una luz para esos alfas lascivos y sin cerebro que están a tu alrededor".
—Exacto, muchacho, tus feromonas son de primera clase. Demasiado dulces y fuertes para tu propio interés. Al menos hasta que estés completamente acoplado. Pero aún queda un largo camino por recorrer hasta allí.
"Estoy eternamente agradecido a los cielos porque lograste ocultar tu olor antes de venir a la Secta", comenta su Shizun. "Pero no te preocupes, te protegeré, ni siquiera ese mocoso podría atraparte contra tu voluntad. He decidido que no ascenderé hasta que vea a tu descendencia crecer sana".
"¿Qué?", pregunta sorprendido Jing Minghoa y luego se da una palmada en la frente. Eso significa que toda la generación Ming no ascenderá hasta que jueguen con éxito a ser casamenteros.
"Pero Shizun... eso"
"Sin peros, Qingqiu. Estás permitiendo que tu olor se filtre de nuevo. Y sí, te lo mereces, deja de condenarte por mis decisiones".
