Lunes.
Roma
Me había quedado dormida, no escuché la alarma.
Miré la hora del celular toda desorientada, me fijé y era las 07:48 AM, claramente no llegaba ni cagando al colegio.
Me levanté rápidamente al baño, para lavarme los dientes y despertar a Thiago, mi hermano menor.
-Thiago, amor, buen día, levántate rápido que estamos llegando re tarde al cole, me quedé re dormida- Le dije suavemente para que no se asuste el chaboncito.
-Un rato más, por fis, déjame dormir no me jodas Roma- Me dijo recién despierto con la voz ronca y se tapó con la sábana devuelta.
-¿¡Yo joderte!?- Dije indignada- Dale, te levantas ya, ¿Me escuchaste?, vestite.
Solo se dedicó a mirarme mal y levantarse con su mejor cara de orto a vestirse.
Lee hice una chocolatada porque no iba a dejar que Thiago se vaya sin desayunar para el colegio, además que dice que la leche que le dan allá es una mierda, según el.
Thiago bajó rápido con el uniforme puesto y la mochila ya lista, cuando vió la chocolatada se sentó el sillón y se la tomó un poco mucho rápido.
-¿Ya estás?- Le pregunté para irnos ya a la escuela.
-Sí, vamos- Dijo adormilado.
-Bueno dale, camina rápido, vení- Dije para poder ponerle la campera y salir.
Nos abrigamos los dos y salimos rumbo al colegio, hacía un poco de frío ya que a la noche había llovido un poco.
Me fijé si venía el colectivo, además de que tenía a Thiago dormitando en mí hombro, me dió miedo la cara, deah.
Pude descifrar el colectivo y en efecto era ese, desperté a Thiago de golpe, haciendo que este se asuste, lo tironeé del brazo y subimos al colectivo.
Tuvimos el orto de que iba vacío así que nos sentamos hasta que lleguemos a la escuela.
No tenía ganas de que me pongan media falta pero lo más probable era que sí me pongan media o una falta, obvio, si eran las 08:12 y yo recién me subía al colectivo.
Llegamos y nos bajamos corriendo asustando tanto a la gente como al chófer que iba en el bondi.
Acompañé rápido a Thiago a su aula y le pedí disculpas a su maestra, ahora el desafío era ahora llegar a mí aula y que me miren todos.
Entré al aula y lo primero que escucho es un "Buenas noches" de nada más y nada menos que del tarado de Mateo.
A este chabón lo odiaba, y para rematar la vieja chota me empezó a preguntar por qué poronga había llegado tarde.
-Profe, disculpe, me había dormido tarde y tuve que acompañar a mí hermano hasta su aula y- La chupapija de la maestra me interrumpió.
-Esa no es excusa Aguirre, vaya y siéntese al lado de Palacios- Dijo con un semblante serio
Pero la concha del mono, ¿Justo con este pelotudo tengo que sentarme?
Igual sí, imbécil, si habías llegado re contra tarde y el único banco que estaba desocupado era al lado del pibe este.
Y juro que tengo mis razones para odiarlo, empecemos
Cuando era más chica me molestaba diciéndome cosas sobre mí físico, personalidad, y un apodo re lindo (noten mí sarcasmo) claro, "vírgen con cara de puta", no me dolía en lo absoluto las cosas que me decía Mateo, pero si fue una de las cosas que si me puse a pensar.
En segundo grado me cortó el pelo todo chueco, sí, tenía el pelo por la cintura, y qué se puede esperar de el, claramente lo iba a cortar mal.
Se hizo la hora para salir al recreo y rápidamente vino mí mejor amiga, Sharon, hacia mí.
-Boluda que, ¿Qué hacés sentada con el mismísimo Mateo Palacios?- Mí amiga estalló en risas.
-Dah pelotuda, ¿Sos tonta o te falla mal? Me obligó la vieja pelotuda esta, no la soporto ni a ella ni a Mateo- La miré con tremenda cara de culo- Aparte me dejaste sola, putita, ¿Quién te dió el permiso para sentarte con el Camilo? No porque llegué tarde te tenés que sentar con otros, traidora-
-Boee, perdón amiga, te amo- Dijo abrazándome y me dió un beso en el cachete- Te propongo algo- Dijo con carita de feliz cumpleaños.
Ahora con qué pelotudez va a salir está mina.
-¿Qué vas a preguntarme ahora?- Rodé mís ojos.
-No hagas así, pareces tonta, eh, bueno, voy directo, mañana el Manu hace una joda en su casa, y yo necesito que vayas, aparte el me dijo que te quiere ver, tenés que ir, te lo ruego.
-Estás loca, ¡Boluda es martes mañana! ¿¡Cómo querés que vaya!?, aparte, ¿Con quién dejo a Thiago? Acordate que mi mamá se fue de viaje, y tendría que faltar mañana.
-Daleee, no seas amargada, pareces una vieja- Dice triste- La vas a pasar bien, postaa, dale, plis.
-No boluda, aparte no tengo rop- La rubia me interrumpió.
-Eso no es un problema, yo te presto beba- Dijo sonriente.
No había forma de ganarle a esta piba
-Es más, ya no te pregunto más, a las 21:00 te paso a buscar, dejás a Thiago con mí mamá, Dylan va a estar.
-Bueno, dale, pero que conste que si no me gusta me debés 3 paquetes de gomitas- Dije yo señalándola con mí dedo índice, y con un tono amenazante.
-Ok, trato mí amor- Dijo mi amiga.
Sonó el timbre para volver al aula, eso significa que tengo que bancarme al Mateo devuelta, re lindo el día por suerte.
Me senté en el lugar de la ventana, ya que Mateo no llegó antes me senté ahí.
-Fo- Bufó- Loco siempre usurpando vos, yo quería ir ahí, la puta madre.
-Bueno jodete boludo, bancatela- Dije sin importancia.
-Roma y compañía- Dijo la profe- Silencio, a trabajar.
Mateo rodó los ojos y no hizo nada en el resto de la clase.
Pensé que el día iba a ser más trágico, pero estuvo bastante tranqui para estar sentada al lado de ese tarado, demasiado tranqui diría yo.
OK
Que miedo chavales
Me sangra todo, yo yá no quiero ser girl
Chau me voy a mi baticueva, ahrex que ya ando metida en ella (la baticueva, ojoo 🥺)