Capitulo 2

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La reina Eclipsa se dirigió a la cámara oscura, un lugar secreto donde se guardaban los tesoros más oscuros del reino. Allí, encontró el libro de hechizos prohibidos, cubierto en una capa de polvo y miedo.

"Es el momento de hacerlo", se dijo, abriendo el libro y buscando el hechizo. La página se abrió, revelando un texto en sangre y tinta oscura.

"La sombra de la luna", leyó la reina Eclipsa, sus ojos brillando con anticipación. "Un hechizo para robar el poder de mi hermana".

Con una mano temblorosa, comenzó a leer el hechizo, sintiendo el poder de la oscuridad crecer en su interior. Pero, justo cuando estaba a punto de completar el ritual, escuchó una voz detrás de ella..

La reina Eclipsa se sintió sorprendida y asustada al escuchar la voz detrás de ella. Se dio la vuelta y vio a un súbdito que había estado a su lado durante muchos años. Su nombre era Malakai, un hombre silencioso y discreto que siempre había sido leal a la reina Eclipsa.

"¿Qué estás haciendo, Malakai?", preguntó la reina Eclipsa, intentando mantener la calma. "¿Por qué estás aquí?"

"Lo siento, mi reina", respondió Malakai, su voz temblorosa. "Pero no puedo quedarme callado. Te he visto buscar el libro de hechizos prohibidos. Sé que estás planeando algo malo. Y yo... yo no puedo permitir que lo hagas".

La reina Eclipsa se sintió sorprendida y enfadada. ¿Cómo sabía Malakai lo que estaba haciendo? ¿Y por qué se atrevía a desafiarla?

"¿Qué sabes de esto, Malakai?", preguntó, su voz firme y amenazadora. "¿Quién te ha dicho que estoy planeando algo malo?"

"Lo sé porque lo he visto con mis propios ojos, mi reina", respondió Malakai, su voz firme. "He visto a la reina de la luna, Selene. Ha estado buscándome, preguntando si sabía algo sobre ti. Y yo... yo no he podido mentirle".

La reina Eclipsa se sintió como si le hubieran dado un golpe en el estómago. ¿Cómo había descubierto Selene su plan? ¿Y por qué Malakai no había dicho nada antes?

"Malakai, eres un traidor", gritó, su voz llena de furia. "Te arrepentirás de haber dicho eso".

Pero Malakai no se arrepintió. En su lugar, se acercó a la reina Eclipsa y le dijo:

"Lo siento, mi reina. Lo siento con todas mis fuerzas. Pero no puedo callarme cuando sé que estás haciendo algo que puede dañar a la personas que más amo

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