El fantasma de la opera 𔓕 Katsudeku [ Especial Halloween ]

Primera parte

1/2

El teatro, abandonado y polvoriento, era apenas un reflejo de la grandeza que había tenido en sus días de gloria. Asientos de terciopelo desgastado, lámparas cubiertas de telarañas y cortinas rotas, todo parecía un recuerdo lejano de una era dorada. Un grupo de personas se había reunido para una subasta de objetos olvidados y antiguos del teatro, cada uno con su historia.

El subastador, un hombre con voz grave, comenzó a describir el siguiente artículo:

—Lote 666 —anunció mientras señalaba una gran lámpara de araña envuelta en un lienzo. La multitud observaba con curiosidad, algunos reconociendo el símbolo de una era pasada—. Esta araña de cristal fue testigo de uno de los misterios más oscuros de nuestro teatro, el caso del "Fantasma". Un mito, o tal vez más que eso.

Entre los asistentes se encontraba Izuku Midoriya, ahora un hombre mayor, pero sus ojos reflejaban una nostalgia amarga, recuerdos de juventud y emociones que aún lo perseguían. Habían pasado muchos años desde que había pisado ese lugar, pero la memoria de aquel "Fantasma" seguía viva en él.

Junto a él, Shoto lo observaba en silencio, percibiendo la tristeza en los ojos de Izuku. Él también recordaba los eventos que habían ocurrido allí, la sombra que había acechado al chico y el poder que había tenido aquel hombre sobre su esposo.

El subastador continuó, su voz llenando el espacio vacío:

—Y ahora, nuestra siguiente pieza es algo más personal —dijo, sacando de una caja de terciopelo un objeto pequeño pero significativo—. Una máscara. La máscara del Fantasma.

Izuku contuvo el aliento. Aquella máscara de porcelana, rota en un lado, reflejaba el misterio y la obsesión de alguien que había marcado su vida para siempre.

Katsuki Bakugo.

El teatro estaba en su apogeo, vibrante y lleno de vida, con la orquesta afinando y los bailarines preparándose para el estreno de la temporada. Las luces iluminaban el escenario principal, donde una chica castaña se posó frente a la audiencia, su vestido reluciendo bajo las luces. Una breve pausa de silencio recorrió el lugar antes de que comenzara a cantar.