Redención - Jinx

Capítulo 1

La noche llegaba con la completa caída del sol. Dentro de uno de los lujosos departamento en aquel lugar, la habitación principal emanaba calidez, comenzando un ambiente lujurioso, ello por las dos personas unidas en un pasional beso que compartían cama.
Yoon-Gu se encontraba rodeando el cuello ajeno, siendo sujetado de la cintura por detrás de su espalda, mientras la otra mano de Heesung se metía por su ropa y acariciaba su muslo; el actor estaba sobre él, dominado en al situación. El pelinegro ya necesitaba aire, empujado como pudo al más grande, respirando con rapidez; el rubio no perdió tiempo, pasando a su cuello para atacarlo con chupetones y mordidas, apretando con fuerza cerca de su trasero, provocándole leves gemidos.

Heesung no sabía cuando se había vuelto tan aficionado de sus noches con el chico, pero después de tantas veces encontrándose en su departamento, ya no podía pensar en una noche sin adentrarse entre esas suaves y firmes piernas. Antes no lo había visto, pero Yoon-Gu era realmente atractivo en tantos aspectos.

Se alejo un poco del peleador, admirando con orgullo su obra en el cuello blanquecino. Termino por sacar su mano de la ropa ajena, parándose sobre sus rodillas en la cama, terminando por sacar su playera blanca y volver a acercarse para susurrarle al oído.
  –Estás tenso, ¿qué tal si te ayudo con eso~? –lamió su cuello, causando un escalofrío en Yoon-Gu, quien volvía a salir de sus pensamientos para poner atención en la situación.

  –S-si, puedes co-continuar… –no había escuchado su pregunta, pero la mayoría de veces el rubio sólo buscaba aprobación de seguir, cosa que solía avergonzarlo, pero aunque replicara el otro no dejaría de hacerlo.

Heesung miro unos segundos el rostro de Papa, notando como su mente se perdía en algún punto fijo sin realmente ponerle atención. Era claro que estaba distraído con algo.
  –Sabes lindura, preferiría que estos momentos yo fuera tu única preocupación.

  –¿Eh? Ouh, lo siento, pondré atención a usted a partir de ahora –estaba apenado, volviendo a ver al hombre, notando hasta ahora que este ya no portaba la ropa de arriba.

  –Bueno… Creo que ya no importa –suspiró decepcionado, separándose del pelinegro, tomando su playera y sentándose a un lado del chico para volver a ponerse la prenda. No era que ya no quisiera, pero el ambiente no se sentía igual, y además no estaba tranquilo sabiendo que algo le preocupaba–. ¿Quieres decirme que sucede? Haz estado extraño desde la mañana.

  –No es tan importante… o nuevo –susurro lo último, aún así siendo escuchado por el rubio. Siguiendo a Heesung, se acomodó sobre la cama, recargándose en la cabecera para ser escuchado mejor.

  –Es de nuevo el problema con Jaekyung, ¿no? –soltó algo cansado.

  –¡Si, es que-! –suspiró frustrado–. Lo que le está pasando no es justo, todo con ese bastardo de Junmin se siente extraño, ¿cómo no nos dimos cuenta de su trampa? Si sólo no le hubiera pasado eso en el pie, muy posiblemente Jaekyung aún mantendría su racha de victorias y nada malo hubiera pasado con el Team Black –su miraba estaba baja, sobre pensando una y otra vez la situación sin encontrar sentido en todo eso.

Heesung sólo lo veía en silencio. Últimamente el tema del Team Black y la "trampa" planeada para Jaekyung se volvía lo único que salía de su lindo pelinegro; comenzaba a hartarse de tener el nombre del fornido hombre 24/7 a su alrededor, pues tanto los medios como su manager no dejaban de mencionar toda la problemática que salió a raíz de aquella pelea. Parecía ser la única noticia importante en todo el mundo.
  –Bueno, ni tú o yo podemos hacer mucho ahora –Yoon-Gu lo volteó a ver, sabía que tenía razón–. La policía está investigando todo lo que sucedió en los vestidores y el cambio del spray, ya diste declaraciones y estoy seguro que muy pronto podrán dar con quien hizo eso, deja de preocuparte tanto.

Tomó su rostro, dándole un corto beso tratando de animarlo. Yoon-Gu desvío su mirada avergonzado, haciendo reir al actor, quien recuperando un poco su ánimo lo tomó del brazo, haciendo que se sentará sobre su regazo, pasando sus manos a su cadera para besarlo nuevamente.

  –Pronto estará todo bien. Sabes que no tuviste la culpa –tomó una de sus mejillas, acariciándole levemente.

  –En eso no, pero si la tuve de que Kim Dan se tuviera que ir –se alejó nuevamente del hombre, recordando cuando se enteró de la decisión del castaño–. Yo sabía que él no había sido quien cambió el spray, estuve con él comprobando todos los productos, incluso había llevado otro tipo de cosas para asegurarse que nada saliera mal. El doctor Dan jamás me dio algo para desconfiar, y aún así dude. Si sólo hubiera hablado antes con el entrenador Park y Jaekyung… –se sentía mal de sólo pensarlo, cristalizando sus ojos, siendo reconfortado por Heesung, quien lo apego más a él, uniendo sus frentes y abrazándolo cálidamente para acariciar su espalda.

  –No hubiera sido diferente. Con lo poco conociendo a Kim Dan, aún así hubiera preferido presentar su renuncia debido a lo penoso y correcto que es –Papa aún no estaba convencido, apretando un poco sus labios–. Oye, toda esa situación puso tensos a todos, tal vez sólo sentiste que no era el mejor momento. Yo no creo que seas culpable de la renuncia de Kim Dan, y puedo apostar que de poder preguntarle a él tampoco te haría responsable, ¿ok? –por último besó su frente, bajando al chico para dejarlo nuevamente sobre la cama–. Te prepararé algo rico de cenar bonito, y luego te llevaré a tu departamento. Espérame aquí.

Así, salió de la habitación, dejando solo al pelinegro. Sentía que Heesung podía tener razón, pero aún así, no podía dejar de pensar en que debía disculparse directamente con Dan, pues con todo ni siquiera había podido despedirse de él.

Ya no quería pensar en ello, así que se levantó de la cama, recogiendo su sudadera (siendo lo único que el actor logro quitarle), volviendo a ver la cama aún con el paquete de condones nuevo tirado por ahí. Debido a su distracción no habían hecho nada; no era que fuera un adicto al sexo, lo disfrutaba al hacerlo con Heesung, pero tenía el "trato" con el hombre sobre ese tipo de cosas. Viendo la forma en que había hablado cuando confesó su preocupación, posiblemente sólo había logrado molestarlo.

Por otro lado, Heesung comenzaba a mezclar distintos ingredientes, teniendo la mente perdida. "Es de nuevo el problema con Jaekyung, ¿no?”, "…luego te llevaré a tu departamento".
  –Mierda, si sigo hablando por inercia voy a terminar nuevamente sin cojer… –susurró con algo de molestia.