★#3 Capitulo#★
El aire entre Sprout y Astro se volvía más pesado con cada segundo que pasaba. Los ojos de Sprout estaban clavados en los de Astro, llenos de un odio creciente, mientras que Astro apenas se molestaba en devolverle la mirada. La indiferencia en el rostro de Astro solo alimentaba la rabia que Sprout intentaba, con cada vez menos éxito, mantener bajo control. El pequeño cuerpo de Sprout temblaba ligeramente mientras cerraba los puños con fuerza, las uñas presionando contra sus palmas, dejando marcas en la piel. Su mente solo repetía una y otra vez: "No dejaré que te lo lleves..."
-No voy a permitir que sigas acercándote a Cosmo -gruñó Sprout con una voz ronca, apenas conteniendo la furia que hervía en su interior-. Sé lo que estás haciendo, Astro. No creas que me engañas, sé que intentas arrebatarme lo que es mío. ¡No lo voy a permitir!
Pero Astro permanecía impasible. Su rostro no mostraba el más mínimo interés en las palabras de Sprout, como si no tuviera ni la más mínima relevancia lo que estaba ocurriendo entre ambos. Con una lentitud deliberada, Astro desvió la mirada hacia otro lado, soltando un suspiro apenas perceptible. Su expresión era seria, pero llena de desdén, casi como si estuviera aburrido de la situación.
-No me importa lo que pienses, Sprout -respondió finalmente, con una voz tan baja y fría como una ráfaga de viento helado-. No me interesan tus sentimientos, ni tus celos, ni tu desesperación. Todo esto es insignificante para mí.
El tono de Astro encendió aún más la rabia de Sprout, que golpeó la mesa de manera repentina, provocando un estruendo que resonó en toda la habitación. Astro ni siquiera se inmutó ante el ruido, simplemente continuó mirándolo de reojo, con la misma expresión vacía y desinteresada. Para Astro, esto no era más que un espectáculo patético de parte de Sprout, un niño que había perdido el control de sus emociones.
-¡No entiendes nada, Astro! -gritó Sprout, inclinándose hacia adelante, con los ojos brillando de furia-. ¡Cosmo me pertenece! ¡Es mío! Y no voy a permitir que lo arruines con tus sucias intenciones.
Astro se cruzó de brazos, su postura relajada contrastaba con la agitación de Sprout. -¿Mío? -repitió con una leve sonrisa burlona-. ¿Y qué te hace pensar que Cosmo es solo tuyo? ¿Acaso te lo dijo? ¿O simplemente es algo que te inventaste porque no puedes soportar la idea de que él pueda estar cerca de alguien más?
Las palabras de Astro golpearon a Sprout como un balde de agua fría, pero en lugar de calmarse, solo hizo que su furia aumentara. -Cállate... -susurró Sprout, su voz temblando de ira-. No tienes ni idea de lo que hablas.
Astro dejó escapar una risita burlona, disfrutando del espectáculo. -Claro que no, Sprout. Seguro que sabes todo lo que siente Cosmo, ¿verdad? Seguro que él te eligió a ti y no a mí... -Astro hizo una pausa, acercándose lentamente a Sprout-. Pero... ¿y si no es así?
Sprout sintió como si el suelo bajo sus pies se tambaleara. Los celos lo carcomían, y cada palabra de Astro era como un dardo venenoso que se clavaba en su corazón. Estaba a punto de explotar nuevamente cuando, de repente, un sonido detrás de ellos interrumpió el tenso intercambio.
Cosmo apareció en la puerta de la cocina, con el rostro lleno de preocupación. -¿Qué está pasando aquí? -preguntó, mirando a ambos con el ceño fruncido.
Sprout y Astro reaccionaron al instante. Ambos se giraron hacia Cosmo, y casi de inmediato, sus expresiones cambiaron drásticamente. Sprout, que apenas un segundo antes estaba al borde de un ataque de furia, forzó una sonrisa brillante y despreocupada, como si nada hubiera ocurrido. Astro, por otro lado, simplemente bajó los hombros y dejó caer su expresión seria, adoptando una postura cansada y desinteresada, como si todo lo que acababa de ocurrir no tuviera la menor importancia.
-¡Oh, Cosmo! -exclamó Sprout con una falsa alegría, mientras se acercaba a él con pasos rápidos-. No pasa nada, solo estábamos... hablando. ¡Nada de qué preocuparse!
Astro asintió lentamente, sin esfuerzo alguno por ocultar su falta de interés. -Sí, solo una charla... ya sabes.
Cosmo no estaba del todo convencido, pero decidió no insistir. Aún había una ligera preocupación en su rostro, pero trató de sonreír para no incomodar más la situación. -Bueno... las galletas estarán listas pronto, solo me faltan un par de detalles -dijo, con un tono aún dubitativo.
Sprout asintió, estando de acuerdo en que pronto llegaría. Una vez que Cosmo volvió a la cocina, Sprout giró lentamente su mirada hacia Astro, con una sonrisa torcida formándose en sus labios mientras se acercaba peligrosamente a él. Se inclinó lo suficiente como para que sus labios quedaran cerca del oído de Astro, susurrando con malicia. (Que ni tiene oído XD pero solo para entender donde está)
-Esto no ha terminado, Astro... -amenazó con una sonrisa oscura-. No importa cuánto lo intentes, no dejaré que te lo lleves.
Astro, con el ceño fruncido, no apartó su mirada de la de Sprout, pero su expresión de desdén permanecía. Desviando la cara, dejó claro que no le daría más importancia a las palabras de Sprout. Lo único que se pudo escuchar de su parte fue un suspiro lleno de indiferencia, mientras dejaba que Sprout se consumiera en su propio odio.
Sprout mantuvo esa sonrisa forzada un poco más, sus ojos reflejaban una mezcla de desafío y furia, mientras Astro seguía ignorándolo.
Sprout dejó de mirar a Astro, sintiendo que la rabia se desvanecía. Sin decir una palabra más, se dirigió a la cocina donde estaba Cosmo. Al entrar, encontró a Cosmo con una expresión preocupada y forzó una sonrisa, decidido a dejar atrás la tensión. Astro, por su parte, se quedó atrás, observando cómo se alejaba, sin mostrar interés en lo que ocurría.†-Continuara-†
★-Final del cap#3 Y quería pedir disculpas tarde en subir el siguiente capítulo pero no tengo tanto tiempo 💔 pero intentaré ser algo activo y no dejar muerto está historia JSJJSKS. Gracias por ver!!-★
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💤🍓Cadenas del corazón 💤🍓 Dandy's World
RomanceInformación: 🫂... Créditos: Con mucho cariño, esta historia ha sido creada por mi y Luz. Es nuestra primera vez escribiendo juntos, y hemos puesto el corazón en cada detalle. Luz ha contribuido con ideas mágicas, ayudando a desarrollar los personaj...