Pussy Por Accidente

[Andrés]

Katsuki ya había disfrutado mucho los privilegios de tener un coño. Le fascinó cuando supo que podía tener más de tres orgasmos en un solo rato. Su récord de rondas seguidas había mejorado mucho.
"Maldita sea, de lo que me perdí estos días por ocultarselo a Izuku" pensó, así que quería recuperar el tiempo perdido.

—Kacchan, no. Estoy seco y tengo que trabajar mañana temprano—se quejó Izuku nervioso al ver que su adorado e insaciable esposo estaba listo para la décima ronda.

—Yo te despierto—

—Kacchan...—regaña al oír el comentario en doble sentido —Es en serio—

—No seas cobarde, Nerd. Necesito recuperar estos días que no cogí—le quita la cobija, decidido

—¡Kacchan, me duele la cabeza! ¿No podemos solo abrazarnos y dormir?—se queja casi con un puchero, arrebatandole de regreso la manta.

Rueda los ojos—Ya, cálmate—besa su mejilla, se acurruca a su lado y acaricia los rizos—Vamos a dormir—

—Gracias, Kacchan—

—Sí, sí, lo que sea—

Al menos trataría de descansar. Un rato. A media madrugada Izuku se daría cuenta que Katsuki no estaba en la cama. La luz del baño estaba encendida. Frunce el entrecejo—No puede ser que se esté pajeando a esta hora—se levanta, molesto y toca la puerta agresivo—Katsuki, ¿se puede saber qué mierda estás haciendo?—gruñe

—Izuku...—Escucha la voz temblorosa, temblorosa con tintes de miedo. Ahí se le esfuma el coraje, cuando se abre ligeramente y los ojos rojos y cristalizados parecen suplicantes de ayuda—lo rompí—balbucea

—¿Qué cosa, mi cielo? Kacchan, no me asustes, déjame ver—

Katsuki niega y hace una mueca de dolor. Izuku no tiene más remedio que empujar la puerta y entrar al baño. Se asusta al ver que hay sangre entre sus piernas. ¿Estaba herido? ¿Se había lastimado?—Kacchan... ¿Qué?—

—Duele, duele horrible, Izuku—se queja y suelta el llanto de desesperación, rabia e impotencia—maldita sea, duele como puñaladas—

—¿Dónde? ¿Dónde duele, mi amor?—lo guía hacia el inodoro, baja la tapa y coloca una de las toallas para que se siente

—¡Todo! Me duele el estomago, el trasero y el maldito coño. Izuku lo rompí y me voy a morir. No sé si quiero vomitar, cagar o llorar—estaba hasta pálido—ni las heridas por batalla duelen tan de la mierda—

—Okay, okay, mi cielo, tranquilo, respira—

—¡Estoy respirando, maldita sea! ¿Qué  parte de "me estoy desangrando por la cuca y que me duele el trasero" no entiendes?—

—Kacchan, no me grites. No te estás desangrando, bueno sí, pero no. Es normal. Se llama periodo, le pasa a las mujeres y es completamente normal—

—¡¿Llamas normal a este infierno?! Pobres de las mujeres. Deku, somos pendejos al lado de ellas. Quisiera que sentieras esta maldita agonía
—gruñe con lágrimas en los ojos, tomándolo del cuello del pijama—Dime que sabes cómo se cura esta mierda—

—No sé mucho, jamás creí que fuera a necesitar saber yo... no puse atención realmente, sé lo básico. Primero te llevaré a la cama, necesito que estés cómodo en lo que voy a la farmacia por toallas sanitarias —

—¡Haré un desastre con las sábanas!

—Pondré una toalla de baño mientras, no te preocupes, tienes que estar comodo—

—Lo dudo mucho, me duele el culo. Te espero aquí, date prisa—se cubre la boca, reteniendo el reflejo nauseabundo. Se sentía muy mal. Se le estaba escapando el alma por la cuca e Izuku nada  más se le quedaba viendo como baboso. ¿Por qué el que graba nunca hace nada?