Día uno |Cap 3

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Era de mañana, como siempre. El sol que con su luz iluminaba la U.A, estaba sediendo a su lugar más alto. Pisadas fuertes se piano por los pasillos, lo que hizo que el pequeño pecoso se despertara.
—¿Quien hace tanto ruido de mañana?— Se cuestiono el peli verde frotando una de sus manos en sus ojos. Hasta que un golpe en su puerta lo hizo sobresaltarse. Fue inesperado.
El pecoso abrió la puerta de su dormitorio con delicadeza, y ahí estaba el rubio cenizo, con expresión adormilada,pero de pie, con una pequeña flor roja en su mano, apenas visible.

—Ah, katchan...¿Que sucede?— Pregunto el pecoso viendo intrigado al rubio quien ni siquiera se molestaba en verlo a los ojos, hasta que rompió su silencio
—Izuku...— hablo el cenizo con algo de timidez. Hasta que con nada de delicadeza le extendió aquella flor roja al pecoso. El rojo era el color favorito de aquel peli verde. —Solo tómala .— Hablo desviando su mirada el cenizo, pero se lograba ver un pequeño tinte rojo en sus mejillas.
—¿De verdad, katchan?— Pregunto con una leve sonrisa el pecoso tomando de forma delicada aquella linda flor. El cenizo solo al darle ese pequeño regalo suspiro y paso a hablar. —¿Quieres...Venir a comer a casa, deku?— Dijo el cenizo mirado hacia otra dirección, como si estuviera buscando a alguien. Y ahí estaban, denki y mina junto a Kirishima, haciéndole señas apresuradas, denki con un cartel que le explicaba que debía hacer, o decir. Y este decía con signos de exclamación : "¡Deku no, dile Izuku!".

El rubio se exaltó al ver qué le estaban regañando. Por lo que decidió corregir ese pequeño error. —Digo...Izuku.— Hablo con un leve nerviosismo. El pecoso se extraño un poco ante tan repentino cambio de actitud del cenizo.—Katchan...Me gustaría, pero no puedo, prometí a uraraka y a Serio ayudarles en los entrenamientos.— Hablo con algo de pena. Su expresión era extraña,como si no estuviera siendo sincero. Era cierto, no estaba siendo sincero con el cenizo, solo pensó que, tal vez, estuvieran tratando de jugarle una broma de mal gusto. El cenizo nunca le invitaría a ir a su casa, o al menos eso pensaba. Frunció su ceño y le devolvió la flor a katsuki.
—En serio lo siento, katchan —
Hablo 'Apenado' cerrando la puerta de su dormitorio. Lo habían Plantado en seco. El cenizo se quedó estático y se giró a ver a sus amigos quienes estaban más sorprendidos que el mismo Rubio.

—A ver a ver...¿¡Que paso ahí!?—
Exclamó denki, sobresaltado y sorprendido ante tal humillante rechazo.
—No tengo idea...Nadie rechaza tremenda estrategia.— Hablo la peli rosada con seriedad.
—Tal vez piensa que es alguna especie de broma.— Recapacito Kirishima.
—¿Y si no le gustó la flor?— Cuestiono el cabellos eléctricos.
—Nah, sabemos que a Midoriya le gusta el rojo, imposible que no le haya gustado.— Respondió la rosada. A todo esto, el cenizo estaba sentado sin decir una sola palabra, parecía que le dolió ese rechazo. El había dado su esfuerzo en animarse a hablar pacíficamente con el. Mientras mina y denki discutían el por qué el pecoso rechazo a Baku, Kirishima bio de reojo a su amigo, y noto su bajo ánimo, a lo que se acercó a el con intenciones de animarle.

—Animo, Baku, seguro que tal vez en otro momento, Midoriya este dispuesto a pasar tiempo contigo.— Hablo cálidamente el pelo de picos. Los otros dos quienes se dieron cuenta al instante de aquella pequeña charla, solo pusieron una expresión de pena ante lo sucedido. —No te desanimes, Bakugo.— Hablo la de cabellos rosados, intentando ayudar.— Mina tiene razón, amigo. Solo ten paciencia, estoy seguro que con nuestra ayuda, tendrás el corazón de Midoriya en tus manos.— Hablo el rubio electrico con positividad. El cenizo suspiro, y embozo una leve sonrisa. Los tres amigos se quedaron atónitos, nunca vieron a su amigo sonreír con sinceridad. —Mina, sigamos con tu plan.— Hablo el cenizo. La rosada sonrió con determinación, y comenzó a idear planes para ayudar a su compañero.
—Bien, Vayamos al paso Dos. Exclamo sonriendo.
—La idea es que Mido-Mido te tenga más confianza.— Agrego. —Asi que pensé,¿Por qué no darle pequeño detalles sin que se de cuenta?, Tal vez así captes su atención.—

.Más tarde, el cenizo hizo caso a los planes de sus amigos, y uno de esos pequeños detalles era o darle un regalo, algo que le guste junto a una nota, o hacerle favores. Katsuki optó por hacer ambas, necesitaba que Izuku lo quisiera, aunque significará quedarse sin dinero en el proceso.
Así que fue a la tienda que estaba cerca de la U.A, y compro unos chocolates, unos dulces. Sabía que a deku le gustarían esos. Solía comerlos mucho de pequeño. Luego, se dirigió rápidamente a su habitación, tomo una hoja de papel a rayas, y una lapicera de color negro, y comenzó a redactar sus sentimientos en leves palabras.

'Izuku, tal vez suene estúpido, pero quiero que sepas, que todo esto que estoy haciendo por ti, no es ninguna broma o juego pesado.
He estado pensando, y creo que te debo muchas disculpas, por eso te invite a entrenar la otra vez. Quiero que, si quieres, me acompañes a dar una vuelta en la plaza. Se que esto no es suficiente para convencerte, pero créeme, si aún no estás convencido de esto, en estos días haré todo para que lo creas.

Att: Kat-Chan.'

Literalmente había escrito ese tonto apodo que el pecoso le había puesto , pero todo sea por llamar su atención.
Soltó un suspiro, y salió de su dormitorio para que junto a Kirishima fueran hasta el dormitorio del pecoso.
—¿Crees que me crea?— hablo el cenizo.
—Solo se paciente, baku.—
Sonrió el de pelo picoso.

Ya se encontraban a escasos pasos de aquella puerta. Kirishima se alejo dejando a Bakugo hacerlo solo. Tal vez no significara mucho, pero para Bakugo, claro que lo era. Estaba expresándose.

—Bien...Aquí vamos...—

¡Se Mí Novio! |BKDk| littlemidoMidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora