un mundo donde los humanos viven en paz, junto a criaturas antropomórficas y heteromorficas, los humanos al combinar su ADN con esas criaturas, ellos desarrollaron dones o poderes que podían usar con libertad, algunos lo usaban para el bien ayudando...
Samder poco a poco de los ojos despertando en la azotea junto a la caja que le había caído posteriormente.
Samder:-el chico toca su cabeza ya que siente un ligero dolor- diablo con ese sueño o solo efecto del cigarrillo -se sienta en el suelo-.
Behemoth:no, no fue así.
Aquel ente que había aparecido en aquella habitación oscura, se presenta enfrente del chico peli negro, el ente, el cual ahora muestra una silueta más imponente con una armadura negra siendo rodeado ahora por una energía Violeta, se acerca a él.
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Behemoth: y déjame decirte algo que los hábitos de un fumador no son ciertamente lo más sanos.
Samder:entonces todo fue real, bueno sí lo que lo que vivi es real déjame decirte que, esa fue la forma más fácil que alguien haya tenido la oportunidad de hacer trato con alguien poderoso.
Behemoth:-voltea hacia atrás y ve la ciudad- el mundo cambió en los años que estuve aquí, es tan bello, pero sería mejor si no fuera tan ruidos y y los niveles de contaminación son alarmantes.
Samder:Bienvenido a los tiempos modernos, esa es tu forma la que yo solo puedo ver, mira si vas a estar conmigo solo te pido dos cosas uno no seas tedioso Y ido si tiene una queja de dila.
Behemoth: correcto jefe.
Samder:-se levanta y sacude su pantalón- por el momento y no nos acaso y en el camino te voy enseñando la ciudad.
Behemoth:está bien.
El chico y la criatura caminan por la ciudad de la parada de autobuses donde él toma el autobús en el camino explicando a la criatura cosas de los tiempos actuales y enseñándole lugares de la ciudad aunque la gente que va junto a él, lo toma como un loco por estar hablando solo, el chico baja del autobús y camina por unos minutos, tanto que el sol ya se oculta, caminan un poco hasta llegar a una mansión lujosa.
Behemoth: vives ahí -exclamo algo curioso al ver la mansión-.
Samder:sí ahí vivo.
El chico entra a la casa y es recibido por una mujer de 38 años de edad, de pelo albino, ojos color azules, y vestida con un suéter de cuello de tortuga de color blanco, pantalones negros y zapatos deportivos.
Ella era Sakura Nitta, la segunda esposa del papá de Samder, y también es madre de tres hijos que son los hermanos de Samder.
Sakura:hijo estas de vuelta me alegro, -le da una sonrisa calida- mucho verte.
El chico no corresponde el saludo de las mujeres y súbele hasta llegar a una puerta que abre y entra a su habitación.
