𝑺𝑶𝑴𝑩𝑹𝑨𝑺 𝑫𝑬 𝑶𝑻𝑹𝑶 𝑴𝑼𝑵𝑫𝑶 [JJK X TEAM]

Capítulo 1

Después de haber estado comiendo durante unos 15 minutos, decidí que era hora de pagar la cuenta. Con un ligero alivio en mi pecho, me levanté y me dirigí a la caja, donde pagué rápidamente antes de salir a la calle. Tenía un nuevo objetivo en mente: encontrar una tienda de videojuegos cercana.

Mientras caminaba, saqué mi teléfono y busqué la dirección de la tienda más cercana. Al encontrarla, noté que estaba a solo unas estaciones en metro. Perfecto, pensé. En un par de minutos podría estar allí, sumergiéndome en un nuevo mundo virtual que me ayudaría a distraerme.

Me dirigí a la estación de metro, sintiendo un ligero cosquilleo de nerviosismo en mi estómago. Al entrar, las luces fluorescentes iluminaban el pasillo y el sonido del tren se escuchaba en la distancia. Me compré un billete y esperé en la plataforma, pensando que, al menos por ahora, todo parecía normal. Pero una parte de mí seguía alerta, recordando que este mundo estaba lleno de misterios ocultos.

Mientras el tren llegaba y las puertas se abrían, subí rápidamente, asegurándome de encontrar un lugar cerca de la ventana. A medida que el tren se deslizaba por las vías, miraba las estaciones pasar, pero mi mente seguía centrada en la extraña criatura que había visto. ¿Y si hay más como ella? ¿Y si son peligrosas?

Mientras el tren avanzaba, la atmósfera se volvía cada vez más densa. Miré por la ventana, observando cómo las luces pasaban rápidamente. Sin embargo, la sensación de incomodidad seguía creciendo. Fue entonces cuando vi algo moverse en la esquina del vagón. Era una sombra oscura que se deslizaba entre los pasajeros, casi imperceptible, como si se fundiera con la penumbra.

Recordé de inmediato la escena de Mieruko-chan, donde la protagonista se enfrentaba a criaturas que acechaban en el metro. Mi corazón se aceleró al imaginar que estaba viviendo algo similar. Las sombras se movían furtivamente, y de repente, noté que una figura con un arma se movía de un pasajero a otro, como si estuviera eligiendo a su víctima.

Las personas a mi alrededor parecían ajenas a la presencia de la criatura, sumergidas en sus teléfonos o hablando entre ellas. Pero yo no podía apartar la mirada. La sombra se acercaba a un hombre de mediana edad que estaba sentado justo frente a mí. Mi instinto me decía que debía actuar. Saqué mi teléfono con manos temblorosas, intentando no hacer ruido mientras me preparaba para capturar la escena.

Con el corazón latiendo con fuerza, enfoqué la cámara hacia la sombra justo cuando se detenía frente al hombre. El flash de la cámara se disparó, iluminando brevemente el interior del vagón. La figura se volvió hacia mí, sus ojos brillando con un fulgor que me heló la sangre. Sin embargo, logré tomar la foto justo a tiempo.

El tren se sacudió y la criatura desapareció entre los pasajeros, pero ya había conseguido lo que quería. En mi pantalla, la imagen mostraba la sombra y el arma, un recordatorio palpable de que este mundo tenía secretos oscuros.

El tren se detuvo y el hombre se levantó, ajeno a lo que acababa de ocurrir. Me sentí frustrada y asustada al mismo tiempo. ¿Qué era eso? En mi mente, un torbellino de preguntas giraba sin cesar. Sabía que debía seguir mi camino, pero la imagen de la sombra y el arma permanecía grabada en mi mente.

Finalmente, el tren llegó a mi destino. Me apresuré a salir, tratando de sacudirme la sensación de paranoia que me acompañaba. Mientras me alejaba de la estación, reflexioné sobre lo que había visto y la foto que había tomado. Era obvio que este mundo tenía más sorpresas de las que podía manejar, y estaba decidida a descubrir qué más se escondía en las sombras.

Con el corazón aún acelerado y la foto de la sombra guardada en mi teléfono, caminé rápidamente hacia la tienda de videojuegos. Cada paso era un recordatorio de lo que había presenciado en el metro, y la adrenalina aún corría por mis venas. ¿Qué demonios está pasando en este lugar? me pregunté, sintiéndome cada vez más intrigada y ansiosa.