Conejito Delicado-[DekuBaku]

1:Destino y Siempre

Miro con timidez y una sonrisa tierna se formó en su rostro mientras movía su rabo rápidamente y sus largas,suaves y blanquitas orejas bajaban y subian. Estaba emocionado no podía evitar dejar en claro que no había nada que pudiera arruinar su buen humor o eso pensó.

Sintió de golpe el como una de sus delicadas orejas era estirada con fuerza haciéndolo soltar un quejito mientras dejaba caer su teléfono en aquel duro y frio piso y dirigia sus manos a su oreja sintió su cuerpo palidecer y sudar frío al ver a la responsable de esto no tuvo de mirarla en realidad para saber quien era. Ochako Uraraka. Quien solo miraba con una sonrisa arrogante y divertida al pobre conejito.

— ¿Que te sucede cariño? — preguntó burlona y con tono de voz suave estirando con aun más fuerza la oreja adolorida del conejito.

— Mírate solo eres una perra en busca de abrirle las piernas a todos cuanto hombre se te cruza en la puerta asqueroso y repugnante — dijo Ochako y luego le hizo un profundo arañazo en la mejilla del conejito que se quejo aún más.

Odiaba cuando le decía así "cariño" o "lindo" era repugnante para el sentía que con esas palabras solo parecía burlarse y pisotearlo aún más fuerte de lo que hace ya con el. Estaba asustado sabía que no podía tocarla ni un mechón de cabello seria expulsado y tachado de agresor de nada más y nada menos de la niña del "director". Claramente esa no sería una opción pero no se dejaría pisotear tan fácil físicamente no puede hacer nada pero verbalmente si.

— ¡ahhh! ¡¿Que crees que haces perra?! — se quejo la gata castaña por la fuerza usada en su muñeca y luego es soltada de golpe y de manera brusca.

— No se tu dime Zorra — dijo indiferente el más joven de los Bakugo.

— ¡Te atreviste a tocarme imbecil! — dijo enfurecida Ochako mientras sobaba su muñeca adolorida.

— ¿Pregunte? — soltó recogiendo su teléfono del suelo.

Ese comentario hizo enfadar aún más a la gata que solo dejó salir un sonoro gruñido lo cual hizo reír internamente al conejito cenizo. Le gustaba ver arder el mundo pero no con el dentro su madre o como el le dice su querida vieja bruja no lo crío para esa mierda. Era solo una niña de papis creyéndose la dueña y autoridad del lugar. Eso le importaba poco almenos debía de saber como manejar la y lo dejaría en paz.

— ¡¿Como te atreves a faltar me al respeto?! — grito aún más fuerte la castaña haciendo que ya todos en aquel comedor miraran tal escena sin mover ni un musculo.

— [Mírate solo eres una perra en busca de abrirle a todos cuanto hombre se te cruza por la puerta repugnante y asqueroso] — sonó de aquel dispositivo y luego lo apago dejando a la castaña con la palabra en la boca.

— ¿Por que no sigues? Es muy interesante lo que estás diciendo aquí sabes — dijo burlon activando nuevamente la grabadora de su teléfono.

Aquello hizo poner nerviosa y asustada a la castaña que parecía tiesa en su sitio. Sabía que con esa grabación era su palabra contra la suya misma era algo irónico suspiro haciéndose el tonto y confundido y se giro recogiendo su bolso en la silla. Escuchaba los murmullos y risitas de algunos compañeros eso hizo que sonriera y riera internamente. Tal vez no pueda defenderse físicamente pero verbalmente era capaz de lo peor.

— Me gustaría quedarme pero no tengo todo el día para perderlo con una zorra que solo busca "atencion" — dijo el conejito girándose y comenzar a caminar no sin antes sacandole el dedo intermedio a la castaña que se sorprendió ante tales palabras y burla a su persona.

####

No había nada mejor que un café y unos panecillos después de un duro y pesado día. Una un tanto fuerte lluvia arrasando afuera la verdad a el le gustaba mucho la lluvia le era relajante y tranquilizador pero se centro mas en su delicioso cafe en manos. Almenos eso le daba un empujón para soportar la temporada de exámenes. Soltó un casi ronroneo al beber un poco de su café al cerrar sus ojos no noto una cierta figura sentarse en frente suyo. Al alzar la mirada noto unos esmeraldas chocar con sus rubíes. Y un cubre bocas en negro cubriendo su rostro con una gorra y capucha. Eso hizo que se pusiera algo incomodo y nervioso.