leyendo padre (Naruto)

Capítulo 4

—Bueno, yo quiero leer el próximo capítulo —dijo Ino, pidiéndole el libro a Shizune, quien se lo pasó con una sonrisa.

Equipo Remolino

Tsunade se encontraba en el departamento que le facilitó su sensei, ya que no se sentía preparada para volver a la villa Senju, Shizune se encontraba preparando la cena mientras ella bebía un poco de té recordando el tiempo que compartió con los Uzumaki, Mía era una niña muy especial, de cierta forma le contagiaba su felicidad con sus gestos y forma de hablar, Naruto por otra parte demostraba un instinto paternal que la hacía preguntarse que sucedería si alguien atentara contra su hija,

—No volverían a ver la luz del sol —murmuró Naruto con una expresión oscura, imaginando que alguien pudiera lastimar a su pequeña.

en general disfrutó mucho con ellos y le encantaba su compañía, de repente sintió como su alumna la movía para que reaccionara

-"qué sucede Shizune?"- la morocha la observó divertida, llevo ya un tiempo diciendo que la cena está lista y usted parece que se encuentra en otro lugar, acaso le sucedió algo interesante?"- Tsunade recordó a Naruto y se sonrojó -

"no nada, vamos a comer que tengo hambre"- se fue sin dejar que su alumna siguiera con su interrogatorio, Shizune solo sonrió su maestra andaba extraña pero feliz y eso era bueno, incluso bebía menos.

—Al parecer, ellos dos tuvieron un impacto positivo en usted, Tsunade-sama —comentó Shizune

—Así parece, Shizune —respondió Tsunade con una sonrisa mirando a Naruto y a Mia

Naruto se encontraba en su cabaña sobre el monumento Hokage, había dejado a su hija durmiendo antes de marcharse, el mañana debía estar temprano en la torre Hokage para la asignación de los equipos, aunque su participación era mera formalidad ya que sabía que su hija sería su alumna solo iría para saber como se conformarían los otros equipos, y quien sabe quizás deba asegurarse que ningún otro sensei quiera a su hija ahora que había subido sus notas, siempre era mejor estar listos para todo, miró por última vez el bosque antes de acercarse a la única vela encendida, miró su cabaña y sonrió

-"tendré que comenzar hacer remodelaciones ya que no seremos solo tu y yo cabaña"- extrañaría su cabaña pero esto era necesario, apagó la vela y se fue a dormir.

—Me pregunto si los equipos serán iguales que aquí —comentó Chouji, pensativo.

—Mmm... no estoy seguro —respondió Shikamaru, encogiéndose de hombros—. Creo que sí, aunque Naruto tiene razón: ahora que Mía ha mejorado tanto, no me sorprendería que otros senseis también la quisieran en sus equipos.

—Si fuera yo, la pediría sin dudarlo, así que no me sorprendería ser una de las senseis que intentara quedarse con ella —añadió Kurenai con una sonrisa.

—Lo siento, Kurenai, pero mi hija se quedará conmigo —dijo Naruto, devolviéndole la sonrisa con firmeza.

—Lo sé... aunque estoy segura de que mi yo de la historia hará el ridículo intentándolo —respondió Kurenai, entre divertida y con un leve puchero, lo que hizo que Naruto se riera por lo adorable que se veía.

A la mañana siguiente varios jounin y chunin se encontraban reunidos en la sala del concejo ya que hoy se conformarían los equipos genin con los alumnos aprobados, ya se corrían muchos rumores sobre la chica Uzumaki que pasó de ser una de las últimas muertas a ser la mejor de las mujeres y algunos hombres de esta generación, bajo la mesa ya se hacían apuestas sobre quien se quedaría con la chica en su equipo, entre los senseis de este años destacaban Kakashi Hatake, Asuma sarutobi y Kurenai Yuhi, los demás eran jounin nuevos que venían a probar suerte con un equipo genin ya que nunca se sabe de donde saldría un nuevo genio, en una esquina se encontraban Asuma y kurenai ambos recostados a la pared esperando que la reunión comience pronto