COCINANDO

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-¡No sé cocinar!- grito corriendo por el pasillo, las chicas no se han levantado, llevo despierta cinco horas, apenas son las siete de la mañana y tengo hambre.

-¡Cállate!- grita Jesy saliendo de su cuarto y tirándome una almohada.

-No me retes-

-Que miedo-

-Te lo ganaste- la rodeo y entro a mi cuarto por mi almohada gris, al salir Jesy ha recogido su almohada de color blanco y se encuentra en el otro lado del pasillo.

-Gris, ¿eh?- dice arqueando las cejas a modo de doble sentido.

-Eso siempre- me sonrojo.

El primer golpe es dado por ella,  golpeando justo en la parte baja de mi estómago, le doy una mirada asesina y lanzo mi almohada, no es que tenga la mejor puntería, es mas, ni siquiera tengo puntería por lo cual debo soportar su mofa cuando la golpea en la pierna izquierda.

Nos dimos unos cuantos almohadazos antes de que las chicas salieran y nos atacarán por estar gritando y no dejarlas dormir. Nos dividimos, del lado de Jesy estaba Perrie mientras que de mi lado estaba Jade. Leigh-Anne era nuestra juez o arbitro. Ellas peleaban porque querían seguir durmiendo mientras que nosotras peleamos porque tenemos hambre y yo no sé cocinar, a Leigh le daba lo mismo.

-¡Ve a cocinar!- grita Perrie riendo mientras me atesta un almohadazo en mi hermosa colita de pato...nadie se mete con ella y sale ileso.

-¡No sé cocinar!- le doy un almohadazo en el estómago.

-Wow- todas nos detenemos con las almohadas en alto, seguras de que ninguna de nosotras dijo eso, lentamente y como psicópatas o mejor exorcistas, giramos la cabeza hacia donde provienen las voces, no me era sorpresa que One Direction estuvieran en esta casa, lo que me era sorpresa era que ninguna de nosotras había ido a abrir la puerta pero luego me acordé de Monica, una mujer de treinta años que nos ayudaba con el aseo de la casa y que para alegría mía también  habla español.

Pasan treinta segundos en los que nadie dice nada...

-Linda piyama, _____- comenta Harry, bajo la mirada para encontrarme con que la blusa de mi piyama es blanca con los nombres de ellos en tinta negra, mientras que el pantalón, que es un short corto de color negro tiene los apellidos en tinta blanca.

¿Soy yo o alguien subió la temperatura de la casa?

Los días en LondresDonde viven las historias. Descúbrelo ahora